Columna Desde la Torre - Grupo Político Criminal

En opinión de Roberto Enrique Rodríguez Guerrero

Columna Desde la Torre - Grupo Político Criminal

La historia nos hace recordar que la sociedad mexicana es paciente, tolerante, mas no tonta, cuando las autoridades abusan del cargo que se les confirió, de inmediato se propaga la voz de enojo, de hartazgo, tal y como fue en este siglo. Por segunda ocasión Andrés Manuel López Obrador, compitió y perdió, pero la siembra estaba por rendir frutos, el odio y resentimiento en contra del PAN y el PRI, fue su principal bandera, de la mano con el compromiso de acabar con la corrupción y meter en la cárcel a los neoliberales, que se habían hecho ricos al amparo del poder.

Miles de palabras de López Obrador, mentiras en las que envolvió su incompetencia y la proclividad de él, su familia y amistades a la corrupción, lo que pudo ser una realidad, la convirtió en una falacia, ahí es donde radica el rompimiento de la ciudadanía con su administración, un presidente de la República, dedicado a otros menesteres, dejó a la población sin verter políticas públicas; en todo el mundo la corrupción es un flagelo, y AMLO, manifestó que la corrupción que existe, sirve para beneficiar al pueblo con empleos, obras, una desvergüenza presidencial manifestada en sus mañaneras, pero también una trampa para los corruptos que al principio los santificaba, la realidad, les soltaba la cuerda, jalándola en el momento que requiere paguen la factura, si cumplen continúan en el ánimo de la 4ª, transformación, de otra manera saca a relucir las carpetas de investigación que les va levantando y sin miramientos a la horca.

El enriquecimiento y convertir al ejército mexicano, en las prostitutas del régimen es una aberración de una institución antes honorable; los contratos leoninos para familiares y amigos; el despilfarro en la CFE y PEMEX; el saqueo de nuestras riquezas ya sea para acumular más millones para Carlos Slim Helú, personaje más rico de México y benefactor del partido Morena, flagelo imperdonable, sin lugar a dudas es haber entregado el territorio nacional a los zares del narco, la delincuencia organizada explota, secuestra, extorsiona y asesina en el 81% de las  entidades, convirtiendo a López Obrador y su pandilla de la 4T.,en un grupo político criminal, que se cubren como el lobo con la piel del cordero, delincuentes con el único fin, lograr el control social sostenido a base de amenazas.

La narrativa y con el viento a favor de pronto se detiene intempestivamente, López Obrador y su grupo político criminal, pierden la atención de la ciudadanía, para migrar hacia el fenómeno Xóchitl Gálvez Ruiz, senadora de la República, que irrumpe en el ámbito nacional destrozando en quince días a la corcholata preferida del presidente, Claudia Sheinbaum Pardo, ubicando a cada quien en el lugar que les corresponde, López Obrador como un mentiroso, machista, el inquilino de palacio nacional, un ente sin sentimientos, que dejó a los niños con cáncer sin medicamentos, el presidente que encubre a Sheinbaum Pardo por el asesinato de 26 personas en la línea del metro de la CDMX; privar a los jóvenes para que tengan una mejor educación y se puedan insertar en el mercado laboral del siglo XXI; un presidente que viola la ley electoral encubriendo las campañas anticipadas de sus corcholtas; un presidente que negó a las madres tuvieran una estancia infantil en donde atendieras a sus hijos, mientras ellos trabajaban; un presidente que solo cree en quienes le echan incienso y  escuchan sus estupideces; un presidente que permite la intromisión de sus hijos en las licitaciones para favorecer a sus clientes y llevarse miles de millones de pesos. Su administración en proceso dictatorial, llena los bolsillos de dinero a la cúpula militar, y soslaya el empoderamiento del crimen organizado, convirtiendo al país un territorio en que la ley no es la prioridad, y la corrupción e impunidad, son los atributos de un presidente de la República felón.

Con la candidatura a la presidencia de la República de Xóchitl Gálvez Ruiz, abre un panorama de esperanza, la fuerza popular de la senadora de la República, la esperanza de que con ella se podrá derrocar al grupo político criminal de López Obrador, Xóchitl, dejó fragmentada la estrategia de continuismo de Morena en la próxima administración 2024-2030, El estruendo de tristeza de AMLO, envió de inmediato el plan “C”, el magnicidio o el golpe militar, su pretensión innata impide que México avance por el camino de la democracia que millones de mexicanos exigen, para tener un país digno y justo para todos, para que lo entienda o no López Obrador, México, no es Venezuela, Cuba o Nicaragua, la ciudadanía no permitirá una dictadura ni disfrazada ni real, una ciudadanía que pugnará por el rescate de nuestro Estado de Derecho, de las instituciones que denigró y desparecieron; un Tribuna Federal Electoral que está dignificando sus atribuciones al ordenar enlistar a López Obrador, como infractor a la ley electoral, violando los preceptos, al emitir opiniones sobre la presencia de votos, vulnerando el reglamento electoral, indicando porque partido no votar en las elecciones del Estado de México y Coahuila “no votar por el bloque conservador para que siga la transformación que venció en 2018” ,manifestó  en la trasmisión de sus conferencias matutinas, haciendo mal uso de los recursos públicos.

AMLO, de mentiroso se transformó en predictor, asegurando que el candidato de la oposición se trata de la senadora Xóchitl Gálvez Ruiz, afirmando que los conservadores la eligieron, y que duda de que Xóchitl por venir del pueblo, sea apoyada, cuando en realidad, y miente López Obrador en decir que es parte de los conservadores encabezados por Claudio X. González. López Obrador con problemas de ubicuidad, es presidente de la República, y a la vez no deja el cargo de presidente del partido Morena, de tal manera que desatiende los problemas del país y está de lleno como activista machista, ruin y chimolero.

La última y nos vamos: Andrés Manuel López Obrador, esta equivocado en todo lo que afirma acerca de quien es Xóchitl Gálvez Ruiz, que, aunque le siga doliendo, Xóchitl es una mujer fuerte y capaz, que pudo ganarse por si misma una posición en la política, mujer indígena, mujer profesionista, mujer que sabe y practica el arte de la política, independiente e inteligente. En cambio, López Obrador el cobarde que odia y a la vez teme a las mujeres, sigue su camino torcido, el del grillo perverso, que, en su tarea destructiva, incita para crezca una ola de odio en contra de Xóchitl y de todo su gran mérito propio, no prestado. 

Andrés Manuel López Obrador, el especialista en desprestigiar y destrozar a sus adversarios, hoy a quienes los convirtió en sus enemigos jurados a muerte, por el guano presidencial, chocó contra un muro indestructible que no permitirá la destrucción de la democracia y nuestra libertad. Xóchitl Gálvez Ruiz, es única, apasionada, pragmática y es directa. Es la fórmula ideal para un país que ya no acepta simulaciones ni mentiras. Es todo lo que pueden soñar los jóvenes, un partido, los mexicanos, mujeres, hombres, adultos mayores, empresarios, científicos, campesinos, “es ideal para México”