Columna Desde la Torre - Cash, camorra y vendettas

Una vez que la Reforma Electoral fue rechazada por el Congreso Federal, el presidente López Obrador,  envíó su contraofensiva para tratar de que su plan B, surta el efecto deseado, estrangular al Instituto Nacional Electoral, ordenando se le quiten los recursos suficientes para llevar a cabo sus funciones. Cuánta razón tienen las miles de voces que se alzaron contra el activista de la 4ª. Transformación, de que era un peligro para México, los opositores y la sociedad mexicana, se descuidaron y permitieron el arribo a la presidencia de la República, a un personaje surgido del arrabal de la política, utilizando todas las artimañas a su alcance, fundamentalmente los recursos, que en lo obscurito recibía en los famosos sobres amarillos, decenas de recolectores del cash, que le permitían realizar marchas, plantones y conformar un equipo de bucaneros que irían acompañándole al abordaje del barco mexicano, sin otro objetivo que resarcir los “daños que los neoliberales les habían causado”. No importó la procedencia del cash, dinero sin registro, cantidades millonarias fueron aportados por los cárteles de Sinaloa del Chapo Guzmán y ahora administrado por sus hijos Guzmán López y el Jalisco Nueva Generación del “Mencho” Nemesio Oseguera Cervantes; estos dos organismos en el clímax,en solo cuatro años de gobierno de López Obrador se convirtieron en empresas trasnacionales, son quienes surten de cocaína a la Camorra de Italia, que tienen en su lista de crímenes, desde tráfico de drogas y de armas a extorsión, sicariato, sobornos, prostitución y robo de arte, entre otros; la Camorra, Ndrangheta y la Sacra Corona Unida— tienen en total un estimado de 25.000 miembros, con otros 250.000 afiliados a nivel mundial, según datos del FBI. 

Se presume que los carteles de Sinaloa y Jalisco tienen el poder del 75% del territorio nacional, con alianza criminales con 150 grupos delictivos en el país; quedó manifiesta su intromisión en la política nacional, el crimen organizado creció y se fortaleció, y también aumentado los asesinatos 135 mil homicidios dolosos en solo 40 meses, y la rivalidad entre los grupos. La participación del narco en los estados de Baja California, Baja California Sur, Sinaloa, Sonora, Colima, Guerrero, Zacatecas y Michoacán. Estados donde ganó Morena, quedó documentada y denunciada ante la Organización de los Estados Americanos (OEA). El corredor de la droga en manos de morena. 

La cloaca puesta al descubierto y narrada en el libro El Rey del Cash, por Elena Chávez, desnudó e hizo trizas el modus operandi de Andrés Manuel López Obrador, confirmó, que, el presidente de la República posee una fortuna de más de 1000 millones de dólares (revista Forbes). “El rey del cash es una crónica nítida y sin concesiones a través de la cual se reconstruye la historia secreta política, personal y financiera de AMLO y su círculo más cercano, indispensable para entender el ADN del mandatario, de la llamada 4T y Morena.» —Anabel Hernández”. 

El Cártel Jalisco Nueva Generación y el Cártel de Sinaloa,  diversificaron su portafolio de operaciones ilícitas como el secuestro, la extorsión a empresarios y pequeños negocios, la trata de personas, prostitución, lavado de dinero, contrabando, piratería y distribución de música, películas y ropa, control de redes de vendedores ambulantes en el metro de la Ciudad de México, cruce de indocumentados aprovechando los narco-túneles transfronterizos para el paso de drogas hacia los Estados Unidos, así como el robo, remarcado y salida del país de vehículos automotores, robo de combustibles a Pemex, robo a transportes de mercancías, sumados sus ingresos con   la producción y tráfico de drogas cocaína y fentanilo (deja 100 mil muertes anualmente en los Estados Unidos), generando “sus negocios”, un ingreso de 19 mil  millones de dólares.  

La mayor afición de López Obrador es la venganza (vendettas), su principal clientela para agraviar, son los neo liberales, los ricos y medios de comunicación. Actualmente enseñando la herida a flor de piel, que no logra pasar página, la derrota sufrida ante Felipe Calderón Hinojosa, fueron 256 mil votos lo que significó su fracaso, argumentó, como siempre, cuando no logra la victoria ¡fraude!, y desde su arribo a la presidencia de la República, son cotidianos los embates contra el INE y a sus principales funcionarios Lorenzo Córdova y Ciro Murayama, no los digiere y los insulta; pretende destruir el pilar fundamental de la democracia mexicana, aspecto nada irrelevante, su obsesión, odio y frustración, lo hace emprender una campaña, que de lograrlo, retrocedería al país a la década de los 60´s cuando el gobierno era el gran elector. No le importa lo que cuesten sus vendettas, tenemos la cancelación del Nuevo Aeropuerto de la CDMX, que está costando al pueblo de México, más de 500 mil millones de pesos, todo porque la obra era un proyecto del PRI; en puerta el pleito callejero al que  quiere llevar el tema de la ley de energía, que de continuar costará a los empresarios mexicanos 50 mil millones de pesos que pagarán por los aranceles a sus exportaciones; la vendetta contra farmacéuticas que dejó al sistema de salud sin medicamentos;  Ponerle el pie a los candidatos favoritos del Consejo Coordinador Empresarial, erradicar los negocios del peñanietismo e impedir que los empresarios se enriquezcan, es una forma demasiado pequeña de hacer política. 

La destrucción del país está a la vista, López Obrador, requiere que los organismos autónomos,  que sirven de contrapeso sean transformados en organismos sumisos a su voluntad, como la vergüenza en que convirtió a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, cuyo titular es un servil más, defiende  los intereses de AMLO, y deja a la sociedad mexicana a la deriva, su último dislate y esperemos que así sea,  por dignidad renuncie al cargo, en su comparecencia ante los senadores de la República, manifestó “No queremos que vuelvan los tiempos de las elecciones controladas por el gobierno y por un partido. No queremos que se repita los fraudes electorales que han marcado buena parte de nuestra historia”. Lo cual es falso, ya que, gracias a la honorabilidad del INE, hoy por desgracia tenemos un sátrapa en lugar de presidente; no se atreve a reconocer que el organismo que representa es un fraude e inexistente la defensa de los Derechos Humanos. 

La última y nos vamos: se espera que López Obrador continúe fracasando en la siembra maligna en la población, del odio y rencor, es lo único que puede dar, es su esencia, la tarea es evitar como ciudadanía la confrontación y dejen de existir dos bandos, los fifís y los chairos, sea un solo México. Tendrá su Waterloo si no ceja en hacerse de recursos ilícitos para mantenerse en el poder, invitando a la delincuencia organizada y a la cúpula de militares corruptos, a su proyecto dictatorial. Honor, sangre y vendettas son para los clanes del narcotráfico, es una práctica criminal, para lo deleznable e inescrupuloso de los políticos López Obradoristas, que convierten el arte de la política en lo más sucio de una sociedad.