Votos en el sur
En opinión de César Daniel Nájera Collado
Ha ganado Joe Biden, indudablemente un personaje mucho más decente que Donald Trump, quien ni siquiera ha reconocido su derrota. Sin embargo, y aunque tal resultado puede representar una buena noticia para el pueblo mexicano, no debemos dejarnos llevar por la ilusión. El modo de gobierno estadounidense, proteccionista y autoritario, no se inventó en 2016, y no terminará en 2020. Que la administración Biden-Harris pinte a ser menos violenta con los mexicanos no significa que se adaptará a nuestros intereses, mucho menos sin el apoyo del Congreso. Y aunando todo a la situación política de nuestro país, este momento resulta bastante delicado. El presidente electo es más diplomático, pero no por ende más tolerante. Y aunque parezca desesperanzador, específicamente ahora, será nuestro país quien deba adaptarse y alinearse a los dictámenes.
El servicio exterior resulta esencial en pos de tener aliados en el congreso y movilizar a los mexicanos elegibles para votar en Estados Unidos. Sin embargo, “de este lado del río” también podemos hacer algo para sacarle provecho a la situación. Debemos esforzarnos por analizar y elegir representantes verdaderamente capaces de establecer relaciones efectivas, y defender los intereses de la sociedad mexicana en general. Permaneciendo en la dinámica de únicamente dar importancia a agendas privadas, nada cambiará. Nuestro actual gobierno poco ha protegido a su pueblo en su territorio, y poco lo hará ante la rigidez estadounidense. Por lo tanto, está en nuestras manos darle el poder a aquellos representantes que se olviden de incompetencias y caprichos. El voto aquí en México también importa, y más que nunca.