Serpientes y escaleras - Las renuncias

Lo dicho: las reglas de las corcholatas presidenciales aplicarán en todas las candidaturas de Morena.

Las renuncias

Luego de que el consejo nacional de Morena fijó las reglas a seguir en el proceso de selección de candidato presidencial y estableció que quienes quieran competir deben renunciar, varios aspirantes a diferentes cargos de elección popular han manifestado su deseo de participar y dicho que se separarán de sus responsabilidades cuando la convocatoria lo establezca. En Morelos tres de los ocho precandidatos ya confirmaron que están listos para renunciar. El proceso de sucesión ya comenzó.

Veamos el escenario que tenemos en el cierre de sexenio morelense:

Hay ocho aspirantes a la gubernatura de Morelos bajo las siglas del Movimiento de Regeneración Nacional: Rabindranath Salazar, Rafael Reyes, Juan Ángel Flores, Víctor Mercado, Lucía Meza, Margarita González, Cecilia Rodríguez y Juan Salgado; son el coordinador de política y gobierno de la presidencia, dos alcaldes, el coordinador de asesores de Cuauhtémoc Blanco, una senadora, la directora de la Lotería Nacional, la secretaria de desarrollo económico del gobierno estatal y un funcionario del IMSS. Rafael Reyes, Rabindranath Salazar y Margarita González ya han dicho públicamente que van a competir y que renunciarán cuando sea el tiempo de hacerlo.

Aunque las reglas que estableció en consejo de Morena es para los aspirantes a la candidatura presidencial, los morenistas entienden que esa regla aplicará en el resto de las posiciones, por ello se han adelantado a fijar postura. La gubernatura de Morelos como la presidencia de la república es una posición muy importante, pero no la única que se disputará; localmente se renovará todo: la jefatura del ejecutivo, las 36 presidencias municipales, el congreso local y federal y el senado de la república.

Si la regla presidencial aplica a los aspirantes a gobernador, es lógico suponer que el mismo camino se utilizará en el resto de las posiciones; pasando el 06 de septiembre, fecha en la cual se conocerá al defensor del proyecto de cuarta transformación en México, el partido lanzará las convocatorias para la renovación de los nueve estados con elecciones concurrentes, incluyendo por supuesto Morelos y la jefatura de la Ciudad de México. Detengámonos aquí para observar un escenario que se pondrá interesante:

Los ocho precandidatos al gobierno de Morelos por Morena se separarán del cargo, lo cual en lo general no impactará la marcha del estado, ni el ritmo de la política; los alcaldes dejarán amarradas sus posiciones con gente de su confianza, lo mismo que los funcionarios estatales, cuyo espacio vacío será ocupado por alguien que determine el gobernador; la separación de quienes participan en áreas federales no incide de ninguna forma en la entidad, porque ninguno de los personajes en cuestión interactúa con los morelenses. Lo que sí puede ser un movimiento que genere reacomodos mayores es la salida del gobernador Cuauhtémoc Blanco para competir por alguna posición en la Ciudad de México o el senado de la república.

Fue el propio jefe del ejecutivo de Morelos quien desde hace varios meses advirtió que estaba interesado en continuar en la actividad política desde alguna posición que buscaría en la Ciudad de México en el 2024; luego de sus expresiones comenzaron las especulaciones: se mencionó que podría ser considerado como uno de los precandidatos del Movimiento de Regeneración Nacional a la jefatura de gobierno, también como contendiente a una de las delegaciones, específicamente la Cuauhtémoc o quizá como futuro integrante del Senado de la República, compitiendo por un escaño en la capital del país. Aunque en algún momento el futbolista señaló que su participación dependía de que el presidente “le diera permiso”, hace unas semanas modificó su comentario señalando que esperaría hasta conocer el resultado de las encuestas para decidir si competirá o no, descartando tajantemente una delegación o el senado como posiciones por las cuales buscaría el voto popular. “No voy a renunciar todavía” dijo unos días a propósito de las renuncias de las corcholatas.

Independientemente de la posición a la que aspire, en el panorama del gobernador Cuauhtémoc Blanco existe un elemento que lo debe hacer pensar dos veces en la posibilidad de renunciar: el congreso. Hasta hace algunas semanas se especulaba que uno de los caminos que podría seguir el mandatario para incorporarse al proceso electoral era solicitando licencias temporales al cargo, es decir, ir y venir a precampaña campaña hasta que la ley le obligase a separarse de manera definitiva; esa hoy ya no es una opción, porque con las reglas que ha establecido Morena quienes deseen contender por una candidatura tienen que renunciar a sus cargos. Y eso no lo va a hacer el futbolista.

El enfrentamiento del congreso con el jefe del ejecutivo es personal y rebasa cualquier situación que hayamos visto en el pasado; los diputados ya ni siquiera se preocupan en justificar su pleito o defender sus decisiones, desde hace varios meses se acabaron los argumentos y en su lugar quedó una lucha frontal con adjetivos, descalificaciones y amenazas que no dejan duda el nivel de confrontación, ni lo que sucedería si Cuauhtémoc Blanco toma la decisión de presentar su licencia.

La ley es clara en estos casos: la designación del sustituto del gobernador corresponde al congreso, al menos 15 de los 20 diputados integrantes de la legislatura, justamente los 15 que le han declarado la guerra a Cuauhtémoc Blanco, quienes impulsan un juicio político en su contra y apostarían por la llegada de alguien opuesto a su persona y proyecto político; posiblemente el fiscal general Uriel Carmona o el propio presidente de la comisión de hacienda Agustín Alonso. Si Cuauhtémoc Blanco presentara su renuncia lo que veríamos es obvio: su lugar sería ocupado por un adversario y el congreso aceleraría los procesos en su contra para inhabilitarlo para competir en el 2024. En ese supuesto el futbolista podría quedarse como el perro de las dos tortas: fuera de la gubernatura y sin posibilidades legales de ser candidato. Peor: sin la estructura del gobierno del estado, quedaría a merced de lo que le quisieran hacer los legisladores y sus dos precandidatos serían devastados.

Las reglas que estableció Morena a sus militantes van más allá del proceso electoral; en casos como el de Morelos, donde la efervescencia política es alta y los conflictos entre poderes ha pasado al plano personal, los candados pueden modificar escenarios y dejar fuera a algunos contendientes, como Cuauhtémoc Blanco.

El jefe del ejecutivo morelense es un activo de Morena, un hombre cercano al presidente y una figura que el partido necesita para obtener votos en la capital del país y refrendar el triunfo; en la Ciudad de México Cuauhtémoc Blanco es una figura muy popular, querida y electoralmente rentable en cualquier posición que busque, pero para ir a hacer campaña en la CdMx, el futbolista debe tener la certeza de que no será perseguido en Morelos.

Y para ello es necesario el apoyo de la federación.

·         posdata

Una vez más el congreso local cuestionó al comisionado de seguridad, esta vez el duelo no fue como el que alguna vez sostuvo Agustín Alonso con José Antonio Ortiz Guarneros, ahora el encargado de atacar al almirante fue Julio César Solís. Por obvias razones el debate fue de mucho menor nivel.

El regordete diputado dijo que el encargado de la seguridad no ha dado resultados, cuestionó su trabajo y exhortó al gobernador a dar un plazo de 30 días a Guarneros para disminuir la inseguridad en la zona de Huitzilac… o destituirlo.

La respuesta del marino fue contundente:

1-      Los diputados cuestionan una instrucción presidencial y ofenden a las instituciones federales y estatales que integran la Mesa de Coordinación Estatal para la Construcción de la Paz.

2-      Retó al titular de la Comisión de Seguridad Pública y Protección Civil del Congreso del Estado (Julio César Solís) a que en un lapso no mayor a 30 días gestione el recurso económico para aumentar el salario de las y los policías, así como para incrementar sus prestaciones.

3-      “Consiga los recursos necesarios para aumentarle el salario a los policías, la asistencia social que deben tener, un Centro de Desarrollo Infantil, becas para sus hijos e hijas y contar con más elementos para que no estén 24 por 24; las tropas deben estar en tres condiciones: operando, capacitándose y disfrutando vacaciones como cualquier colaborador. Lo reto a que me de contestación en 30 días”

4-      Hemos dado resultados en materia de prevención del delito y fomento de la cultura de denuncia, hemos realizado importantes detenciones de personajes que desestabilizaban a la entidad e implementado estrategias como el SeguriChat y la instalación de cámaras de videovigilancia en algunas demarcaciones.

5-      “Desde que llegamos a la fecha hemos logrado 98 mil 548 detenciones, no creo que este señor pueda tener algo comparado con lo que hacemos nosotros; con mucho gusto me puedo sentar con él y atender punto por punto, porque ya basta que esté aprovechando la casa del pueblo para estar ofendiendo sin bases”

6-      Nosotros hemos dado resultados a la ciudadanía ¿El diputado qué ha hecho por la gente?

·         nota

El gobernador Cuauhtémoc Blanco alertó sobre una campaña de desprestigio que se prepara en su contra, en el marco del proceso electoral que está por iniciar. Sin dar detalles de lo que se trata el mandatario se dijo tranquilo y dispuesto a cualquier revisión seria porque “el que nada debe nada teme”.

No sería la primera ocasión en la que el gobernador de Morelos queda en el ojo del huracán por una campaña mediática, pero si sería el momento más peligroso por la situación que se vive y las connotaciones electorales que tendría.

Reitero: el ejecutivo debe dejar a un lado la confrontación e iniciar el proceso de conciliación con todos, porque ya estamos en la recta final del sexenio.

La mejor vacuna contra cualquier campaña de desprestigio está en tener un buen comportamiento y buenos aliados, empezando por la sociedad.

Aquello de “el que nada debe nada teme” ya no aplica. Hoy los juicios son mediáticos, sumarios y muchas veces sin más argumento que la ofensa.

·         post it

Jorge Gamboa dio el campanazo al ganarle la contienda por la presidencia del Poder Judicial a Rubén Jasso. Su llegada refrescó al tribunal, pero su actitud y mala comunicación le ha ido restando presencia dentro y fuera del TSJ.

El magistrado presidente es un profesional del derecho, un hombre técnico que recién participa activamente en política, de ahí los errores que comete y el sensible descenso en su liderazgo. ¡No necesito popularidad! Seguramente pensará el susodicho… y ese puede ser uno más de sus errores. Rubén Jasso llegó fuerte al cargo, pero descuidó su imagen, no comunicó bien sus acciones y al perder simpatías, sus excesos quedaron expuestos y sus errores se magnificaron. El mejor aliado de Gamboa en la carrera por la titularidad del TSJ fue Jasso y su mala imagen.

La historia se repite: ahora el mal visto ya no es Rubén Jasso, sino Jorge Gamboa.

·         redes sociales

El alcalde de Xochitepec cometió una falta legal muy grave. Las consecuencias serán del tamaño de su error.

Comentarios para una columna optimista: eolopacheco@elregional.com.mx

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