¿Quién quiere la revocación?

El tema es reiterado porque el enorme gasto es inútil o al menos inservible en una sociedad que tiene otros graves y urgentes problemas por resolver.

La posibilidad financiera del gobierno mexicano para llevar a cabo la consulta se encuentra en una situación difícil, sobre todo por los efectos económicos que sobre nuestra economía impactó la pandemia. Pero independiente a esa razón, la sociedad carece en general de interés para distraer recursos que le son necesarios en otros problemas como en este caso y que igualmente afectan a la economía, es el de la delincuencia organizada. El crecimiento económico de México es entre las naciones el mas bajo y solo comparado con lo que le sucede a España, hablando desde luego de las naciones que tienen o tenían una economía emergente antes del ataque del virus, por lo mismo, nos hemos empobrecido.

Cuando el presidente es elegido para 6 años, volver a consultar si sigue o no al mando es un absurdo porque la sociedad no tiene dos palabras y ya determinó el tiempo del del gobierno del Presidente  y eso no lo previó la ley que rige la revocación de mandato y la Constitución. Y lo menciono porque la Consulta solo es del interés de un solo hombre: El presidente. Obviamente su partido se lanzó a una cruzada nacional para conseguir las firmas requeridas y desde luego lo hizo básicamente con sus seguidores. Una vez reunida la cantidad de firmantes se procederá a la organización de la consulta, aunque en este caso todo indica que será a medias porque los recursos que por ahora son escasos no alcanzan para darle la formalidad que el asunto requiere y que la ley le marca (igual que una elección presidencial),  lo que la consulta será legalmente inválida ¿De qué o para que nos va a servir una consulta que seguramente no va a reunir el número de votos suficientes para que sea vinculante y el presidente abandone el cargo? De nada porque las posibilidades son muy remotas y en general en la sociedad o al menos en la mayoría, no hay el mínimo interés en generar un potencial conflicto si esa consulta triunfara, porque en ese momento, si la consulta la pierde el presidente y se reunieran los votos necesarios para vincularla, surgiría un problema cuyo camino ya se presentó con Evo Morales en Bolivia, cuando el pueblo le impidió poder presentarse a una nueva elección como candidato lo que originó un problema social muy grande que terminó con su caída y la intervención de las fuerzas armadas Colombianas para retomar el camino de la constitucionalidad de aquel país sudamericano. Evo alegó a su favor, su derecho humano, pero olvidó el derecho humano de los Bolivianos ¿Queremos un problema igual?, ¿tenemos necesidad de tener ese tipo de problemas? NO, por lo mismo es solo el capricho presidencial el que está prevaleciendo y desde luego el partido político en el poder es el que tiene ese interés para complacer a su líder.

La sociedad está en su mayoría distanciada de ese ejercicio que además no se ha hecho y ni tenemos la tradición política de conducir así a la nación. Morena y no los ciudadanos fue el partido que impulsó y sigue impulsando este proyecto, cuando la ley y la constitución hablan de que debe ser un ejercicio eminentemente ciudadano, sin interferencia de las fuerzas políticas o del gobierno y este hecho no se está produciendo de esa forma. El otro Angulo de ver las cosas es que la finalidad sea  que el presidente se encuentre en el foro público en este año que hay elecciones en varios estados y que su figura siga siendo fuente de simpatía con sus seguidores y por eso, aprovechando la situación la promoción de la revocación sobre un hombre en este caso el presidente, le permita tener legalmente foro público para impulsar indirectamente el proceso electoral que se darán en los estados, desde luego a favor de los Morenistas.

El costo a pagar por nosotros los contribuyentes es alto y más aún cuando las necesidades apremian en otras áreas de los servicios que debe tener la población, como en el caso de la compra de medicinas, carreteras, escuelas, policías, etc. Ojalá quepa la reflexión. Esta consulta que en apariencia será incompleta por falta de recursos va a tener otros perjudicados: Los ciudadanos que no podrán votar porque su casilla es demasiado lejos o porque no hubo las suficientes. ¿Qué necesidad de hacerla?