¿Qué haremos con la transparencia?
En opinión de Roberto Salinas
En estas semanas el Instituto Morelense de Información Pública y Estadística (IMIPE) ha retomado su atribución de observar, recomendar, obligar y sancionar a los funcionarios públicos que no cumplen con la transparencia. Después de algunos años de no hacer uso de las multas por la falta de entrega de información de solicitudes que realizan los ciudadanos, ha comenzado a ejercer esta atribución que le da la Constitución local y la Ley de Transparencia. Entre otras, el pasado miércoles 30 de octubre aprobó en pleno la sanción para 4 servidores públicos por no entregar información y este número seguirá creciendo.
En esa misma sesión se aprobaron 115 acuerdos de incumplimientos contra el mismo número de instituciones gubernamentales de Morelos que no cumplieron con la publicación de información en la Plataforma Nacional de Transparencia de los años 2015 a 2017. Tendrán un periodo para subir la información faltante o serán sancionados. Con ello, saldrá a la luz el mal ejercicio de la función pública ya que muchas instituciones argumentarán que las “administraciones pasadas no les dejaron información” algo que muchos consideran que con esa leyenda la pueden librar, otros más, saben perfectamente que eso no basta y que tiene que iniciar procedimientos administrativos o penales, o denuncian o asumen ellos las consecuencias.
El uso de la plataforma de transparencia para el acceso a la información ha ido creciendo cada año y para diciembre se podrían superar las 11 mil solicitudes de información a las instituciones públicas. Sin duda, Morelos es uno de los estados en el que se hace mayor uso de esta herramienta. Desafortunadamente también se ha incrementado el número de recursos o quejas tramitadas por la falta o mala entrega de información superando 1,400 recursos de revisión a octubre de este año.
El Centro de Investigación Morelos Rinde Cuentas ha documentado y publicado lo que consideró excesos y omisiones en el instituto de transparencia de Morelos, pero también reconoce que recientemente haya decidido transparentar y publicar en vivo sus sesiones de pleno, retomó las multas a sujetos obligados y está poniendo atención en la supervisión del cumplimiento de publicación de información en la Plataforma de Transparencia. Le falta mucho por hacer al IMIPE, debe consolidar su autonomía y sacudirse la influencia política y partidista que la ha marcado en los últimos años, fortalecer su trabajo y estructura interior, ampliar su presupuesto y aplicarlo correctamente para acelerar la influencia o presión en las instituciones.
La transparencia en Morelos debe ser también un tema toral para mejorar al estado. Hay mucha corrupción, hay mucha impunidad, hay mucha simulación y muchísima resistencia. Todos hablan de transparencia, todos acuden a eventos y se toman fotos en foros y eventos de transparencia, pero es momento de practicarla.
Por lo tanto, ¿Qué harán los funcionarios con la transparencia? ¿Qué haremos los ciudadanos con la transparencia? Desde la sociedad, debemos seguir usando estas herramientas, perfeccionar su uso, usarla estratégicamente, compartirla, usarla como una forma de rendición de cuentas, de exigencia para procurar mejores gobernantes y exigir se cumpla con la función pública, que es servir y ayudar a mejorar las condiciones de vida para los ciudadanos. El próximo año deberá ser el de la transparencia para Morelos.