PRI Morelos y Alito
En opinión de Víctor Iván Saucedo
Escribo esto desde la objetividad que me permite la distancia; el no haberme involucrado en el proceso de renovación de la dirigencia nacional del PRI ha sido sin duda una decisión atinada en lo personal y en lo profesional, sobre todo ante los resultados obtenidos en Morelos. Aclarando que Alejandro Moreno es una aplanadora, tomó su campaña con la seriedad de un hombre que se juega el futuro y el de su partido, y los resultados para él son tangibles y merece reconocimiento. Pero lo que sucede en la tierra de Zapata es digno de llamar la atención.
Me explico; Alejandro Moreno anivel nacional obtuvo 1 millón 603 mil 725 votos este domingo; pero en Morelos, Alito solo recibió el respaldo de13,636 morelenses; es decir, EL 0.85% DEL TOTAL DE SU VOTACIÓN NACIONAL; lo cual, tomando en cuenta los apoyos con los que contaba y el hecho de que su último evento de campaña fue en el estado, debe tener más que molesto y preocupado al nuevo dirigente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI.
Me queda claro que hubo exceso de confianza y simulación, pero también la gente ha sido más que apática ante los grupos que los conminaron a salir a apoyar a su candidato.
Aunque celebro a compañeros y amigos que acompañaron al hoy dirigente por todo el país y tuvieron una participación más que digna y relevante en el proceso, no deja de parecerme increíble ver a algunos actores locales celebrar el triunfo de Alito en Morelos como si el estado hubiera sido factor determinante y su aportación política preponderante.
Vamos a ser muy claros, los morelenses están hartos del PRI, de su dirigente estatal de papel, sin valor ni valía, del desempeño de sus escasos representantes en cargos de elección popular y su avaricia y sordera política, de la eterna y encarnizada lucha por el control de lo que queda del partido; la gente vio el proceso de renovación del PRI como una broma de mal gusto que no iba a terminar bien, y así fue.
El domingo 11 de agosto me di a la tarea de revisar las redes sociales; el hashtag #ELECCIONPRI no solo no llegó a ser Top 3 del Trending Topic nacional, peor aún, lo que en él se encontraba era vergonzoso para un simpatizante, videos de conflictos entre militantes por un supuesto padrón rasurado, robo de urnas, acusaciones de urnas embarazadas y fraudes, estados con votaciones inferiores al 20% del padrón (como Morelos), burlas hacia el proceso, memes, sátira y escarnio sobre como era un posible que un priísta acusara a otro de fraude (como si el chiste se contara solo). Lo que debió ser el relanzamiento del partido, quedó en un “tirititito”; y en Morelos sirvió para exhibir las carencias y agonía del partido.
Ojalá me callen la boca, ojalá Alejandro Moreno tenga en su agenda inmediata a Morelos, ojalá ponga orden, rumbo y refresque la baraja política del PRI en el estado, ojalá las voces divergentes tengan un espacio, ojalá se erradiquen las prácticas que han puesto al PRI en esta situación, ojalá no me toque ser de los que vean como el PRI Morelos pierde el registro, ojalá…
Ésta, apreciable lector, será la última vez que hable del PRI Morelos… a mi me enseñaron a no hablar mal de los muertos.