Observador político - Las diferencias entre damas del legislativo

En los últimos días, se ha intensificado un pleito político entre dos mujeres que integran la legislatura 54: La petista, Tania Valentina Rodríguez Ruiz vs la priista, Rosalina Mazari Espín. Ambas, se han acusado prácticamente de todo y han rebajado la diatriba. Flojas, alcohólicas, irresponsables y corruptas son los calificativos que se han dicho y difundido en sus espacios de comunicación e incluso, hasta de amenazas contra personal sindicalizado del Congreso. ¡Pobre Morelos! ¡Pobre Congreso!

PLEITO DE COMADRES.- Es inverosímil la política que han desarrollado en casi un año los y las integrantes de la 44 legislatura local, que llegaron con un alto grado de confianza y después del triste y decepcionante papel de sus antecesores, se veía que la actual sería de las mejores en la historia de Morelos. Triste decepción, hoy, con tan solo un año de gestión se le puede calificar en la misma sintonía que los de la 53, porque además de que no han realizado prácticamente reformas legislativas que sean trascendentes y beneficien a la sociedad, sí han demostrado por el contrario, que a la mayoría de las mujeres diputadas -y también a los hombres- las mueve el interés del dinero antes que otra cosa. Hoy, la actual, no se le puede quitar el mote de una legislatura corrupta, después de que no hizo nada por reducirse el presupuesto en al menos el 30 por ciento que representaba alrededor de 120 millones de pesos porque, originalmente esa fue la esencia de eliminar a 10 diputados para que de 30 quedaran solo 20. Hoy, insisto, perciben 418 millones 500 mil pesos en este año cuando son menos dizque los representantes populares. El argumento, en su momento, fue porque querían pagar las deudas millonarias que dejó la legislatura pasada, algo que ha resultado totalmente falso porque hoy en día hay acreedores a quienes se les adeuda y no se les ha pagado.

¿Pero y cuál fue el motivo del conflicto entre Tania y Rosalina?

Todo surgió en los primeros meses de la presente legislatura, cuando se aprobó el presupuesto de egresos del año 2018. En ese entonces, la presidenta de la Comisión de Hacienda, la priista Mazari Espín fue cuando se le fue a la yugular a la titular de la presidencia de la Junta Política y de Gobierno del Congreso del Estado,  Rodríguez quien junto con el G14 lo aprobó vía fast track -como en los mejores tiempos de sus antecesores-, el Paquete Económico 2019 que al final quedó en 24 mil 653 millones 9 mil pesos.

TANIA VS ROSALINA.- Como en las mejores épocas del Santo el enmascarado de plata contra Blue Demon, el Demonio Azul, el recinto parlamentario se ha convertir en ring para estas dos damas que han aprovechado el espacio para decirse de todo y por todo.

Lo cierto, es que las dos han salido heridas políticamente. Por lo que las diferencias agudizaron porque dijo su archirrival que dejó 65 cuentas públicas para su análisis y la señalo de proteger a presidentes municipales tanto del PAN, PRI y PRD, así como del PRD. La diputada plurinominal por el PT acusó a su homóloga Rosalina Mazari Espín, de favorecer incluso a varios funcionarios del gobierno de Graco en la revisión de sus cuentas públicas. Pero sobre todo, a alcaldes que eran fuertemente señalados por sus posibles actos de corrupción como el caso de su amigo, el del Partido Encuentro Social, Alfonso de Jesús Sotelo Martínez, quien fue alcalde durante el periodo 2012-2015 y al final, irrisoriamente solo el encontraron un adeudo de 200 pesos durante su gestión como edil de bello Jojutla. Además de que fue desde un principio señalada por haber negociado desde su curul diversas posiciones con el gobierno del estado y por lo tanto, el secretario de Educación, Luis Arturo Cornejo Alatorre, fue quien le tomó la protesta a Arturo Mazari Espín como rector de la Universidad Politécnica del Estado de Morelos (Upemor), en sustitución de Mireya Gally Jordá.

Ahora, se le señala de proteger no solo al tal Ponchito sino a otros ediles que fungieron como tal desde los años del 2012 al 2015.

En tanto que Rosalina Mazari, le aplicó la huracarrana a la presidenta del Partido del Trabajo, de sobornar, paralizar el trabajo y de incurrir en actos ilegales así como de pretender quedarse con 10 millones de pesos para una estancia que era fantasma y pertenecía a su partido.

La calificó de floja por no sesionar ni de manera permanente su comisión y de solapar hasta la fecha al menos 300 pensiones “doradas”, e incluso, acudir en  estado etílico al recinto legislativo; además asegurar que solo cobrar pese a su falta de compromiso con el trabajo legislativo. Las acusaciones mutuas estuvieron de a peso. Y los demás, solo observando y esperando y cobrar sus 200 mil pesos mensuales que los convertirá en breve en los nuevos legisladores millonarios quienes además, esperan para participar en la recomposición y la repartición de los espacios de poder al interior del Congreso, entre ellos la Junta Política y de Gobierno así como la Comisión de Hacienda. Y en este caso, se relamen los bigotes los diputados de Morena. Otros como Pepe Casas, nadan de a muertito y han dejado de ser “guerrilleros”, porque si no les quitan los 120 mil pesos como se lo habían amenazado con retirarle de continuar con sus críticas hacia quienes en su momento fueron sus jefes y amigos.

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