Observador político - La marcha a favor del ambiente

En opinión de Gerardo Suárez Dorantes

Observador político - La marcha a favor del ambiente

Este viernes, a partir de la una de la tarde se realizará una marcha del Jardín Borda hasta el zócalo de Cuernavaca, y quienes la encabezan son jóvenes estudiantes de diferentes escuelas públicas y privadas, con la finalidad de hacer conciencia de la grave problemática en materia ambiental tanto del estado, del país y del mundo. La marcha, se denomina: “11 y nos vamos”.

LA CONTAMINACIÓN EN MORELOS.- Durante los últimos años, la contaminación en Cuernavaca y el Estado se ha ido incrementando de manera alarmante ante la omisión del gobierno en turno tanto estatal como municipales y por ello, cada vez la situación empeora en áreas como son los ríos y las barrancas. Para ello, se han destinado cantidades de millones de pesos para darles un cambio radical sin que se haya tenido respuesta favorable que evidencia un cambio real y profundo.

Las autoridades en turno, constante y permanentemente señalan de acciones que llevan a cabo para mejorar su entorno, en las que destinan grandes cantidades de dinero. Lo cierto, es que hoy en día, las barrancas son una de las áreas con mayor contaminación y pese a lo que dicen que hacen los gobiernos, los asentamientos humanos –muchos de ellos irregulares- siguen realizando sus descargar de forma directa sus aguas negras e incluso  arrojan sus desechos a las barrancas. Es inaudito pero es real, en las barrancas se han encontrado cuando se realizan limpias muebles entre los que destacan por lo voluminoso que son los aparatos eléctricos.

Es frecuente escuchar hablar a los funcionarios del rescate de las barrancas y de los ríos, sin embargo, los asentamientos humanos siguen aumentando sin ton ni son en sus alrededores y los problemas en cuanto a la contaminación es cada vez peor. Se habla hasta el cansancio de la recuperación en cuanto a la calidad del agua, disminuir los riesgos a la salud y las plantas de tratamiento que se han construido son para ese fin sin y cuyos gastos representaron varios millones de pesos fueron dinero tirado porque hoy en día, la mayoría no funciona y ello repercute en la grave contaminación que hoy es una realidad.

Se sabe que hay 58 plantas de tratamiento municipales pero lo triste, lo preocupante es que no existen porque la ola de corrupción que imperó en la pasada administración fue una constante en todas las áreas y este punto no ha sido ajeno. Hoy, se están analizando las circunstancias porque las denuncias penales que se han presentado por parte del gobierno del estado tiene ese objetivo, de poner al descubierto todas las transas que se cometieron al amparo del poder, el compadrazgos y el tráfico de influencias que se utilizó para la contratación de empresas de estas obras millonarias que hoy sirven para maldita la cosa.

Un ejemplo de lo que sucede en prácticamente todas las barrancas de la capital es la de Amanalco, en donde los comerciantes del mercado más importante y grande del estado como lo es el Adolfo López Mateos, realizan las descargas de sus aguas directamente a la barranca sin importar que era de las más contaminantes. Y jamás pasó absolutamente nada.

“II Y NOS VAMOS”.- A nivel mundial y estatal, los jóvenes están haciendo un cambio para poder luchar contra la grave contaminación ambiental que está destrozando inmisericordemente al planeta y por lo tanto, buscan hacer conciencia para poder frenar la devastación que el hombre está haciendo de la tierra.

Este viernes a la una de la tarde del Jardín Borda al Zócalo de Cuernavaca, realizarán una marcha pacífica, con pancartas cientos de jóvenes estudiantes que han mostrado un interés para evidenciar la corrupción que se sigue registrando en los gobiernos para no frenar las ventas de plástico en todas sus modalidades y contribuir en gran medida a frenar este problema que nos está matando a todos. El único fin es el de frenar el ya el cambio climático, mediante acciones pacíficas, sin afectar el tráfico ni el desarrollo de la región solo para salir de la visibilidad en la que por años estuvieron. Hoy, es tiempo de los jóvenes, quienes están levantando la mano para que no solo los miren y escuchen sino para que atiendan un legítiom reclamo que será en beneficio de las futuras generaciones.

Este movimiento inició en Europa pero llegó al Continente Americano y por supuesto México y Morelos no se han quedado fuera de esta vorágine de acciones que buscan sacudir al mundo y lograr hacer un cambio real y lograr promover un desarrollo y estilo de vida sustentable. Lo que buscan los jóvenes es que colectivamente, se pueda detener la catástrofe que se avecina si no se hace nada y por ello, la importancia no solo de participar y contribuir a las nuevas acciones sino más bien, hacer conciencia y obligar a las autoridades federales, estatales y municipales a que impulsen políticas públicas en beneficio del ambiente y en consecuencia será de la sociedad.

Es importante pues, que haya un compromiso de los gobiernos locales y municipales con relación a estas manifestaciones y por ello, se requiere de un mayor compromiso de los gobiernos en general con la protección del medioambiente, y por ello exigen la reducción de las emisiones de gases contaminantes, la creación de un fondo para invertir en proyectos relacionados con la sostenibilidad medioambiental y reformas constitucionales que garanticen un mayor cuidado de la naturaleza.

Y pese a que Cuernavaca sigue siendo “la ciudad de la eterna primavera”, lo cierto es que ya los problemas ambientales está acechando sobremanera a la capital y con muchos problemas que se tendrán que atender en lo inmediato, con la injerencia del gobierno, iniciativa privada y sociedad porque los problemas ambientales involucran a todos los ciudadanos y porque además, le siguen apostando al desarrollo de la industria y a la generación de puestos de trabajo, pero no a costa del daño a la salud y la destrucción del ambiente.

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