Observador político - América, seguirá durmiendo tranquila en la ESAF

Después del balconeo y acusación directa que hizo contra Alexis Ayala como el presunto responsables del desvió de recursos multimillonarios del fondo Unidos por Morelos que iban destinadas a las familias damnificadas por el sismo del 2017, la titular de la Entidad Superior de Auditoría Fiscalización (ESAF), América López Rodríguez debe estar tranquila y dormir sin preocupación alguna, sabedora que no hay en este momento los 14 votos para poder destituirla como pretendía el G11.

ESCASOS RESULTADOS.- Lo triste, lamentable y preocupante es que la señora América López tal parece que con la información que ofreció recientemente con relación al Fondo Unidos por Morelos fue y es suficiente, es decir, salvó el escasísimo trabajo realizado en esta dependencia que cuesta alrededor de 30 millones de pesos y que muy difícilmente ha logrado estos avances como os que presentó, en áreas fuertemente señaladas por los actos de corrupción como un caso ejemplar: El Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC), incluso, dentro de la Junta de Gobierno tienen un representante y han sido cómplices de estos actos de desvió de recursos de varios cientos de millones de pesos como lo acaba de señalar la titular del órgano operador del agua en la capital.

La titular de la ESAF y los funcionarios de primer nivel deben y pueden dormir tranquilos… al menos por el momento, porque la división al interior del Legislativo les permite que se mantengan en el cargo percibiendo sus más de 70 mil pesos mensuales porque al no ponerse de acuerdo entre los parlamentarios, pueden seguir “nadando de a muertito” y cobrando sus emolumentos por prácticamente no hacer prácticamente nada.

Al igual que el jaloneo por el presupuesto que ya quedó en el pasado sucederá lo mismo en la ESAF donde ha ocasionado incluso reflexión entre los legisladores para evitar que esta tea siga siendo uno de los argumentos para no poder sesionar el pleno y mantenerse las diferencias entre los 20 integrantes en el Congreso.

Lo hemos dicho hasta el cansancio, desde diciembre se evidenció la confrontación y división entre los parlamentarios por lo cual, el panorama se veía incierto, lo mismo que sucedió con el fondo de Bienestar que pretendían aplicar en detrimento del Ejecutivo, en realidad estos dos fueron el tema junto con la cláusula de manejo discrecional lo que ocasionó la ruptura entre los integrantes de la Legislatura LV.

Hay que recordar que primero fue Agustín Alonso quien anunció en Cataluña la inminente desaparición de la Entidad Superior de Auditoría y Fiscalización por supuestos actos de corrupción y su complicidad en muchos casos, donde pese al desvió de recursos públicos y los actos ilícitos que han incurrido no sucede nada y a manera de ejemplo, están dos casos muy conocidos: el SAPAC y en el mismo Ayuntamiento capitalino, temas en los que la ESAF hasta el momento no ha hecho absolutamente nada. De ahí que esta institución ha sido calificada como un “elefante blanco”.

FRUSTRACIÓN LEGISLATIVA.-Luego, vino el turno a Julio César Solís, diputado y dirigente de Movimiento Ciudadano quien no se ha cansado de pronunciarse por desaparecer la ESAF y crear otra institución que incluso, ya tenía el nombre de la misma. Sin lugar a dudas, el tema es controvertido y son los especialistas quienes argumentan que solo cambiaría de nombre y de funcionarios pero al final será la misma historia que tendrá control un grupo de legisladores.

De ahí que no hay consenso entre los diputados del G8 que rechazan la desaparición de la ESAF y califican como un exceso político el que intentan aplicar y que al menos, en los siguientes meses no hay ninguna viabilidad de que proceda ese intento de un cuestionado Julio César.

Lo que se ha dicho es que, primero tendrían que liquidar conforme a derecho a todos los empleados, lo que sería un golpe financiero grave – en plena crisis- por el número de empleados que hay, así como por los altos salarios que perciben y que por Ley, tendrían que liquidarlos conforme corresponde y establece la Ley Federal del Trabajo. Y es que, si fuera su dinero o de la iniciativa privada sería viable pero por el contrario, es dinero público. Es más, si en verdad quieren transformar a la dependencia en cuestión, pueden enfocarse en la destitución de América López Rodríguez, titular de la ESAF así como de los familiares de los exdiputados que fueron designados como parte de los acuerdos cupulares entre los integrantes de la LIV y con ello, se frenaría el enviar a un precipicio cantidades de dinero exorbitantes y ofensivos que se tendrán que destinar si mantienen la idea de desaparecerla.

Por ello, es y sería un exceso seguir con la intención de eliminar la ESAF por todo el recurso económico y político que significaría una decisión de esa naturaleza. Por ejemplo, caso contrario sería la reestructuración y modernización a fondo, con personal cuyo perfil no sea político ni obedezca a ninguno de los actuales grupos actuales en el Congreso, que esté capacitado y preparado para ofrecer resultados inmediatos y evitar utilizarlos como hasta el momento, con tintes políticos como sucedió con el fondo Unidos por Morelos.

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