En plena pandemia
En opinión de José Román
En plena pandemia, el tema no es cuantas vacunas compramos para proteger a la población, sino que urge concluir todos los requisitos para que a toda costa y aun sin haber una necesidad justificada, se lleve a cabo la Consulta sobre la Revocación del mandato de AMLO.
O sea, para el ejecutivo federal y para MORENA, la salud puede esperar, los muertos, muertos serán, los que queden con secuelas permanentes y transitorias producto del efecto del COVIT 19, no son tan importantes como preguntarle al pueblo si AMLO, se va o se queda, cuando todos los elegimos mayoritariamente para 6 años.
Todo porque está en la Constitución y a como dé lugar quiere el presidente que se lleva a cabo la famosa encuesta…aunque no haya dinero para hacerla. Las soluciones propuestas por el presidente además de irreales, son evidentemente inaplicables porque la misma ley y la Constitución prevé que no se puede dar efectos retroactivos a ninguna ley en perjuicio de persona alguna, según reza el artículo 16 de nuestra carta magna. Y eso viene a colación porque quiere que se reduzcan prestaciones los consejeros y altos ejecutivos del INE. Desde luego sin dejar de considerar que tiene razón en su petición y que efectivamente son muy altos sus emolumentos en perjuicio de un justo pago por sus servicios, la realidad es que no es posible sobre la marcha llevar a cabo ese cambio y tampoco, ni remotamente ese ajuste, y si acaso fuera posible, que insisto, no lo es, tendría que llevar un procedimiento jurídico que rebasa el límite de tiempo que falta para llevar a cabo la consulta.
Pero, de sobra es sabido, que nadie está obligado a lo imposible y en este caso debemos entender que se trata de desgastar la figura y la función del INE por ser un organismo de la sociedad totalmente independiente. Y es que al presidente no le gusta tener dependencias que no pueda controlar como ha sido demostrado durante su gobierno. Todos entendemos y ahí tiene razón AMLO que tenemos una de las democracias más caras del mundo, pero lo que no quiere entender AMLO que es producto de las trampas que todos los partidos durante la historia de este país, han realizado, trampeado cuando han podido o han buscado trampear, ya sea rellenando urnas, robando urnas, alterando urnas, modificando cantidades de votos, etc. Ese valor tan caro que nos cuesta nos ha dado tranquilidad porque el INE ha demostrado su neutralidad y tan es así que el propio AMLO obtiene su triunfo por que el INE se lo reconoce y la da su constancia.
El contrapeso de los problemas que enfrentamos lo miramos en el lado oscuro de la Pandemia. Estamos siendo sometidos a la que llaman cuarta ola y eso implica que el gobierno federal requiere dinero urgentemente para compra de medicamentos para darlos a la población y paliar en lo posible los efectos negativos muy serios que produce ese virus. Nos es mas urgente la compra de insumos y medicinas que llevar a cabo una consulta innecesaria, porque en el panorama nacional no miro a ninguna organización será que esté promoviendo la caída o retiro del presidente. Nadie, razonablemente importante, persona u organismo quiere ni promueve su retiro, luego entonces ¿cuál es la urgencia de gastar tanto dinero en algo que nadie trascendente está solicitando?
Sin llegar al exceso, no entiendo al presidente cuando quiere forzar la consulta. ¿Capricho, necedad, politiquería para mantenernos entretenidos y seguir apareciendo en los medios cuando están próximas las elecciones en varios estados del País? ¿Es una manera indirecta donde quiere que su figura, popular desde luego, siga en la palestra cuando la ley le dice que el presidente como autoridad, debe callar y dejar que la sociedad libremente, sin presiones o insinuaciones del poder, incline la balanza de los votos con sus opiniones?. En fin, es un juego tramposo, donde los perjudicados, son la sociedad. O sea, nosotros. Porque los que pagan esta consulta si es que se produce, será con dinero de nuestros impuestos, ellos, los políticos, solo lanzan los proyectos a su entero gusto, nosotros solo seremos las víctimas y los que perderemos dinero inútilmente.