Empresarios y delincuencia organizada
En opinión de Javier Bolaños
Javier Bolaños Aguilar 
Fueron muchos los debates, sobre todo en medios de comunicación y redes sociales, los que se hicieron con el fin de intentar convencer a los legisladores del Congreso del por qué los cambios a las leyes fiscales no debían incluir equiparar la defraudación fiscal como delitos de delincuencia organizada, es decir, igualarlos con el tráfico de drogas, secuestro, asesinato, etc.; todo fue inútil, la mayoría de Morena y sus aliados en el congreso de la unión aprobaron esas modificaciones.
Por supuesto que es fundamental combatir la corrupción, el discurso que se ha utilizado intentando asociar a los críticos de estas reformas con intentos de encubrir a quienes defraudan al fisco y mantener un status de impunidad, es absurdo y solo es una herramienta que intenta justificar a aquellos que no legislan, solo tramitan los proyectos que reciben de sus jefes, de sus líderes, sin cuestionarlos y sin moverles una coma.
Tal como quedaron las modificaciones, cualquier empresa, grande, mediana o pequeña, que reciba una factura falsa será tratada de la misma forma como si se tratara de un miembro de algún cártel, será metido a la cárcel sin juicio de por medio, se cancelarán sus cuentas bancarias, podrán expropiar sus propiedades y consecuentemente quedará sin forma de defenderse.
Es cierto que se especifica el monto a partir del cual se tipifica la delincuencia organizada, pero la exposición y la vulnerabilidad es la misma. Estas modificaciones parecen convertirse en poderosas armas de represión; a través del brazo del fisco, el gobierno podrá convertir a cualquier empresario sobre todo crítico del régimen, en miembro de la delincuencia organizada. Ya sabemos que recurrentemente nos dicen que no son iguales a aquellos que tanto daño hicieron al país, pero suponiendo que así fuera, no se puede legislar sobre la endeble base de la condición humana.
Estas reformas incluso autorizan al gobierno federal para que, mediante petición en secreto a un juez, puedan espiar a presuntos defraudadores fiscales.
Todos los gobiernos intentan siempre aumentar la recaudación, pero todos lo hacen presionando más a los contribuyentes cautivos mientras la informalidad no solo permanece, sino que crece de forma permanente. Falta medir el impacto que estas reformas tendrán sobre las muy necesarias inversiones en México, y el ya de por sí atorado crecimiento económico.
@jabol2
@jbolanosaguilar
