Cuando sea demasiado tarde… - Una semana más en Morelos

En opinión de Gabriel Dorantes Argandar

Cuando sea demasiado tarde… - Una semana más en Morelos

¿Qué tal, apreciado lector? ¿Cómo entra usted en éste, el sexto mes del 2023? Espero que, de salud, usted y los suyos se encuentren bien, ya ve usted que en este país es mala idea enfermarse. Este fin de semana hay elecciones en el estado vecino, ¿no está usted emocionado/a? También ha trascendido una serie de acciones en el glorioso estado de Morelos, las cuales recorreremos en la entrega de mi columna de esta semana, porque la cosa empieza a agarrar velocidad. Es muy interesante ver cómo eventos que ocurren al mismo nivel, pero en estados vecinos, y el ambiente electoral a nivel federal que siempre enrarece el ambiente social, afectan en gran medida al entorno local. Esta semana trascendió una gran ola de violencia en todo el estado (si no es que en el país), del que como siempre, no se menciona en gran medida en los medios.

            El primero de ellos, y nada más por ser mi tema favorito, es la movilidad, la cual fue central a varias de las noticias. Por un lado, el robo de automóviles y motocicletas está por los cielos, por no mencionar el robo de autopartes. Algunas colonias de mayor capacidad adquisitiva de la capital morelense decidieron hacer frente a esta situación irguiendo vallas metálicas para impedir el paso por sus calles, de tal manera que sólo los habitantes de tal calle puedan transitar libremente por ellas. Ésta es una práctica moderadamente común en la ciudad cada que arrecia la violencia, la gente no desaprovecha la oportunidad de hacerse su privada. Sin embargo, todos los años es igual, otros vecinos se quejan, se anuncia que se retirarán y se hace un poco de movimiento, y pues habría que ir a constatar si las vallas siguen ahí (cosa que doy por sentado).

            Por otro lado, la pista de carreras y deportes extremos que comunica a la Ciudad de México con mi amada Cuernavaca también fue noticia a nivel nacional. Ya se había mencionado que los elementos de la Guardia Nacional habían detectado la existencia patrullas con apariencia de ser elementos de la Guardia Nacional, pero sin ser elementos de la Guardia Nacional y en realidad son delincuentes que asaltan a los conductores, cosa que a la Guardia Nacional no parece incordiarle mucho y que la misma Guardia Nacional reconoce no tener la capacidad de solucionar dicho problema. Su servidor, como usuario constante de dicha vía, ha generado una estrategia bastante sencilla para hacer frente a esta incomodidad: si una patrulla de la Guardia Nacional le indica a usted que se detenga sobre esta vía, pise usted el acelerador a fondo y conduzca usted ese vehículo como si de verdad lo hubiera usted hurtado. En caso de realmente necesitar obedecer la orden de detener la marcha, hágalo sólo en lugares donde haya más personas, aunque ello lo haga merecedor de una sanción mayor. El parador de Parres, la gasolinera de Tres Marías, los puestos de comida a lo largo de la autopista, todos son pequeños refugios para cuidarnos de los policías que pueden ser policías o no, pero invariablemente y directamente derivado de tal hecho, sufrirá usted una pérdida de bienestar, aunque sea económica. Héctor de Mauleón (2023, 01 de junio) hace una excelente recopilación de la situación que se vive en la autopista, con nombres y apellidos (tenía rato que su servidor no incorporaba una cita en formato APA riguroso, temblad). Si se conoce el nombre de las personas involucradas en las bandas que ocasionan esta circunstancia, ¿por qué es que no se ha hecho nada por resolverlo? Por las mismas razones de siempre: ya no es posible discernir a las autoridades de los maleantes.

            Siguiendo la misma vía, sólo un poco más hacia el sur, el libramiento de Cuernavaca se sigue cayendo a pedazos, llevan meses instalando las luminarias, y derivado de ello, la ampliación se ha vuelto completamente inútil. Tal obra se inauguró en 2018, si mal no recuerdo, entre decenas de accidentes y pérdida de vida. Pues bien, de los últimos cinco años, ¿cuánto tiempo han cerrado por lo menos dos carriles de la vía para darle mantenimiento? ¿La mitad? Osea que, además de realizar una obra increíblemente deficiente, ¿ni siquiera ofreció beneficio? Ya saben ustedes cuál es mi postura al respecto.

            Ya para cerrar el argumento, circuló el video de un muchacho que embistió otro vehículo, y al reconocerse incapaz de cubrir el costo de la reparación de los daños que ocasionó, sonrientemente se vuelve a subir a su vehículo, lo enciende, y se retira del lugar, con el cinismo y la desfachatez que sólo conocemos en Cuernavaca. Estuvo circulando un par de días en redes, pero ya no supe si lo pudieron identificar y por lo menos decomisarle la unidad, ya que todo indica que no cuenta con todos sus papeles en regla. Un día más en mi gloriosa capital.

            Por lo demás, leí por ahí que le suspendieron al López su canal de Youtube, ya ve usted que era uno de los youtubers más vistos del mundo y quisiera pensar que alguien se puso a contar las mentiras que vierte el señor sobre sus admiradores. Por ahí leí que la maniobra era similar a la que las redes sociales habían implementado en el último año de la administración de Don Trompas, quien paradójicamente también era dado a verter mentiras sobre sus seguidores y aduladores, ya ve usted los paralelismos.

            Por lo demás, si no tiene usted a qué salir, le ruego no lo haga. Estos días he encontrado en el Facebook que, de cada 5 publicaciones, por lo menos dos o tres son una lámina mostrando una persona desaparecida. Quisiera pensar que es fortuito al respecto de las publicaciones, pero ya ve usted cómo está la cosa en mi amado México.

Abrace usted fuertemente a los suyos porque la tiznada no ha muerto, pero anda manchando por todos lados.

 

De Mauleón, H. (2023, 01 de junio). 80 kilómetros que son tierra de nadie. El Universal. Disponible en línea: https://www.eluniversal.com.mx/opinion/hector-de-mauleon/80-kilometros-que-son-tierra-de-nadie/ Consultado: 02-06-2023 11:00.