Cuando sea demasiado tarde… - Temblores, militarización, y libramiento.

En opinión de Gabriel Dorantes Argandar

Cuando sea demasiado tarde… - Temblores, militarización, y libramiento.

Otra vez ya se fue la semana y nos encontramos nuevamente por aquí. Trato mucho de no ahondar en política todas las semanas porque hay mucho más allá de ello, y por las reacciones de usted, apreciado lector, a veces no es necesario estar señalando las vicisitudes de la política local, nacional e internacional, todas las semanas en este espacio. Seguido me comentan que juego al advenedizo del fin del mundo, cosa que es cierta, pero las noticias no son malas siempre, ¿no? A veces hay una que otra nota que nos da tantita esperanza. Pues bien, vamos a ver cómo nos fue esta semana.

            Empezando por el principio, esta semana fue el 37° aniversario del temblor de 1985, y el 5º aniversario del temblor de 2017, ambos acaecidos el mismo día. Este año, para no decepcionar a todos, también tembló el mismo día, menos de una hora después del simulacro conmemorativo. Arturo Erdély (@ArturoErdely), un estadista de la FES Acatlán de la UNAM al que sigo desde la pandemia, tuvo a bien a estimar la probabilidad de que tres años diferentes ocurriera un sismo el mismo día alrededor del .000001 de probabilidad. Para principios científicos, que tiemble el mismo día en tres años diferentes sigue siendo una casualidad, pero para estas alturas del partido comienzo a pensar que alguien allá arriba tiene un muy extraño sentido del humor. Esta semana ha temblado en varias ocasiones haciéndonos pasar momentos de ligera zozobra, pero poco más.

            Pasamos a la militarización del país. Desde el sexenio del fecalísimo Felipe Calderón Hinojosa se inició la guerra contra el narco. Los vecinos de la gloriosa ciudad de Cuernavaca recordarán en diverso grado de profundidad el día que el ejército se movió para atrapar a un capo en el fraccionamiento Los Limoneros por ahí de los límites entre Ocotepec y Ahuatepec. Una de las hermanas de Roberto Madrazo perdió la vida en el operativo, por si no lo sabía usted, apreciado lector, pero el caso es que la acción terminó en los edificios que se encuentran en la avenida Domingo Diez (que tengo entendido que se están cayendo a pedazos y el drenaje se les regresa). Desde entonces, no hemos conocido más de la procuración de seguridad que por medio de la militarización.

            Su servidor estuvo en un evento (no hacen falta detalles) de seguridad en la ciudad el mismo día que Manolito presentaba su renuncia para apostarle a la grande y entraba un relevo a la presidencia municipal de la capital. Tuve la oportunidad de escuchar a una serie de elementos de seguridad que verbalmente manifestaban la intención de destruir a los enemigos de la ciudadanía, los delincuentes. No se necesita haber leído a Michel Foucault para saber que a los delincuentes no se les destruye, la vida de los individuos no es potestad de este aparato de gobierno. Llevamos años pensando en que se tiene que librar una guerra contra los que atentan contra el orden social, y en 20 años de guerra contra el narco hemos descubierto que lo único que se ha conseguido es consolidar el poder que tiene el narco sobre la ciudadanía y las instituciones. ¿Es usted menos pobre, apreciado lector? ¿Ha sido usted beneficiado de alguna manera por las acciones de gobierno durante los últimos 20 años? ¿Considera usted que en el año 2022 es más seguro salir a la calle que en el año 2010?

            Acudió el canciller de asuntos exteriores, el mismísimo Marcelo Ebrard Casaubon a las oficinas de la Organización de las Naciones Unidas a presentar poco menos que un plan de paz para el conflicto entre Rusia y Ucrania. Vamos a dejar de un lado por cinco líneas a Marcelito, porque está cumpliendo una labor encomendada por su pelmazo en turno. Resulta que, la misma semana que Rusia y el presidente Putín declaran la conscripción de la ciudadanía masculina entre los años 20 y 65 para presentarse ante la autoridad militar, en virtud del desastre de intervención que están llevando a cabo en Ucrania, el gobierno de la gloriosa República Mexicana tiene a bien sugerir a otra nación soberana un plan para poder alcanzar la paz en su territorio. ¿Notan la desastroza ironía del asunto? Un país que tiene alrededor de los 150,000 muertos al sexenio (porque aún no termina éste y ya superamos el anterior) tiene a bien sugerirle a otro país cómo fraguar su paz. ¿A nadie se le ocurrió decirle a esta sarta de incompetentes que mejor se quedaran callados? ¿Cómo le vamos a dar lecciones de paz al mundo cuando nuestro país se está cayendo a pedazos y balazos?

            Finalmente regresamos al libramiento de Cuernavaca. No es por decir que ya lo había señalado desde hace años, ¡pero vamos a ver! Esta semana se suscitaron tres accidentes importantes, uno en el que dos motociclistas perdieron la vida en la mañana del viernes. La autoridad sostendrá que los viandantes no cumplieron con las normas de seguridad de la vía, pero ¿no es, en general, responsabilidad de la autoridad la seguridad de las vías? ¿Cuánta gente más tiene que morir en el libramiento de Cuernavaca hasta que a algún político corrupto (porque no hay de los otros) se le ocurra que el Paso de la Muerte sólo genera accidentes y fallecimientos?

            Mientras tanto la cosa camina. Alguien tuvo a bien colocar un recipiente con ácido muriático y aluminio en una de las Facultades de la gloriosa Universidad Autónoma del Estado de Morelos con el fin de evitar un examen o sabotear alguna reunión política dentro de las instalaciones. Más de tres mil personas tuvieron que ser evacuadas y gran cantidad de trabajo se perdió a lo largo del día. ¿Qué pensarán las personas que realizaron tal acto? ¿Serán felices? ¿Sus padres estarán orgullosos de ellos? ¡Qué bien! Lograste asustar a miles de personas con tu acción que tuvo a bien evitar que tuvieras que estudiar. Felicidades, compañero.

            Es así como esta semana se va, entre temblores, balas, y un total desmoronamiento del tejido social. Este país se va a terminar de desmoronar no por las acciones en contra de él, sino por las acciones que supuestamente se están haciendo por enderezarlo. Su seguridad y la de los suyos no es prioridad de este gobierno, ya ve usted que el Commander in Absence le regaló a su hermano ¡una notaría nueva! Así como la gente en Tepito pone un puesto de micheladas, aquí en Morelos se ponen notarías. Así que, si no tiene usted a qué salir, le ruego no lo haga, porque a gobierno no le importa en lo más mínimo su seguridad, su bienestar, o su subsistencia. Es cosa de nada que la gente comience a armarse para defenderse a gran escala de los maleantes que conforman el desgobierno de este país.

            Veremos que nos trae la siguiente semana, porque México no ha muerto, pero seremos nosotros los que le demos la estocada final.