Cuando sea demasiado tarde… - Comenzaron las elecciones.
En opinión de Gabriel Dorantes Argandar
Nuevamente llegó el sábado, apreciado lector, y se ha ido una semana más de este año que parece que no va a terminar nunca. Desde agosto regresamos a la presencialidad en la gloriosa Universidad Autónoma del Estado de Morelos, y fuera de un estudiante al cual amablemente solicité abandonar el aula porque estaba expectorando exageradamente, no parece que vaya a haber nuevos repuntes a corto plazo. Sin embargo, tengo entendido que en Europa y los Esteits se está hablando de una nueva ola, lo que siempre significa una nueva ola por estos lares pocas semanas después. No ha habido nuevas vacunas para nadie, supongo que se van a esperar al año que viene que empieza oficialmente el periodo electoral para la grande de la gloriosa República Mexicana, y derivado de ello se suspenderá la actividad de la Brigada Correcaminos por lo menos hasta mayo, y eso sólo si vuelve a haber una ola importante, porque pareciera que sólo aprendemos de las crisis. Ya saben ustedes la lógica de la prevención en este país, por lo general no se previene cuando hay tiempo para hacerlo, por lo general se previene lamentar cuando ya es demasiado tarde (y disculpen ustedes el comercial). Además de kofkofear que a desgobierno federal se le echaron a perder una cosa así como 5 millones de dosis porque se les caducaron.
Derivado de esta lógica de anticiparse a la contienda electoral que comienza el año que viene y culmina en julio de 2024, se han estado instaurando maniobras que, para mi punto de vista, han dejado en evidencia que los que ocupan los puestos hoy en día tienen toda la intención de utilizar el aparato de gobierno a manera de estrategia electoral. ¿A qué me refiero? Pues vamos allá.
Mientras escribo estas líneas, voy viendo que se aprueba en el senado una reforma a la Ley Federal del Trabajo que amplía los días de vacaciones, que empiezan en 12 días a partir del primer año de antigüedad laboral, duplicando los 6 de la legislación todavía vigente. ¿Qué le gusta al mexicano promedio más que el dinero regalado? Pues las vacaciones. Si la cámara de diputados (las minúsculas son adrede) aprueba tal moción, en caso de que usted tenga 5 años de antigüedad en su trabajo actual, podrá disfrutar de 20 días de vacaciones al año. No está nada mal, en lo personal opino que lo que habría que reformar es la jornada laboral en sí misma (Dorantes-Argandar, 2021, 24 de julio): la idea es transformar la lógica misma de los días, trascendiendo del paradigma de las 24 horas a uno de 36 horas, y una semana de 9 días en lugar de 7, esto en virtud de que las horas de sol cada vez significan menos para las labores.
De aquí se atraviesa una tangente: el fin de semana pasado cambió por última vez el horario, de tal manera que cuando uno se levanta a las 6 de la mañana, ya es moderadamente de día, y no como antes que llegaba uno a trabajar a las 7:30 y todavía era de noche. A mí en lo personal me gusta más así, pero he escuchado comentarios de mis estudiantes que salen y trabajan de noche que la sensación de inseguridad crece en gran medida en virtud de que a las 6 de la tarde ya es de noche. Considero que esta acción corresponde más a atentar contra un símbolo del “neoliberalismo conservador” (¿notan cómo ya no se usa tanto el término? igual y ya es medio insípido), más que otra cosa. Total, uno se tiene que levantar por las mañanas para ir a trabajar y regresar por la tarde enfrentando el tráfico de todos los que queremos llegar a casa a descansar, y para gustos, los colores.
Así, apreciado lector, encontrará usted hechos acaecidos en las últimas semanas que por separado parecen tener algunas intenciones más claras que otras, pero cuando las pone usted todas en conjunto, realmente son pan y circo a diferentes pistas que tienen como fin tenernos entretenidos de aquí a fin de año. Por ahora tengo entendido que gobierno federal no encuentra dinero para subsanar las deficiencias de los ayuntamientos y algunas universidades públicas. No desaprovecho la oportunidad para reconocer la labor del Dr. Gustavo Urquiza Beltrán, Rector de la máxima casa de estudios del glorioso estado de Morelos, quien ha conseguido reducir el déficit presupuestal y asegurar el cierre de año en todos los años de su gestión. Además, tengo entendido que este lunes es su cumpleaños, así que le deseamos unas felices 15 primaveras desde esta, su humilde tribuna.
Así que como siempre, apreciado lector, si no tiene usted a qué salir, le ruego no lo haga. El mes de octubre cerró con una cifra oficial de 2500 muertos por bala y/o cuchillo, que todos sabemos que en estos menesteres el número real debe de estar, cuando muy pobre, en el doble de la cifra oficial. El presidente municipal de Cuernavaca y el Commander in Absence se siguen echando la bolita sobre quién tiene la culpa, mientras esta semana levantaron a una muchacha en la Ciudad de México y apareció en la carretera a Tepoztlán. Abrace usted fuertemente a los suyos porque el aparato de gobierno de este país ya no es un elefante blanco, más bien es un zombie que no acaba de entender que murió hace ya varias décadas.
Dorantes-Argandar, G. (2021, 24 de julio). La (nueva) Jornada Laboral. Cuando sea demasiado tarde… El Regional. Disponible en línea: https://www.elregional.com.mx/cuando-sea-demasiado-tarde-la-nueva-jornada-laboral Consultado 11-03-2022 18:40 hrs.