Yo tengo otros datos - Los informes presidenciales: un diseño anacrónico
En opinión de Carlos A Galicia
Atrás quedaron los festejos de los informes presidenciales, cuando el titular del Poder Ejecutivo suspendía labores y se paralizaba el país. El “monarca del país” rendía ante el Congreso de la Unión las acciones que había hecho a favor del pueblo de México. A cambio, el pueblo se volcaba con mantas agradeciendo al Presidente el esfuerzo y dedicación. Los aplausos y estruendos eran parte del escenario del viejo régimen.
Con Andrés Manuel este ritual cambió, tiene mayor presencia el evento que aparte organiza con su equipo de trabajo y secretarios de despacho y gente muy cercana. Mientras tanto, el informe oficial lo entrega el Secretario de Gobernación en el Congreso.
En términos prácticos existen dos informes uno del Presidente y el otro de manera institucional.
Sin embargo, el modelo de los informes sigue siendo la misma desde que gobernaba el PRI. Lo que ha cambiado es que ya no se suspenden labores ni se paraliza el país. Pero la afamada glosa del informe es una pantomima. Las comisiones legislativas son las que se encargan de revisar las acciones que ha llevado a cabo el Ejecutivo a través de las comparecencias.
En la mayoría de los casos, los legisladores no tienen información, más que los datos que maneja el Ejecutivo ni tampoco conocen la problemática de los diferentes rubros. En ocasiones este tipo de eventos sirven para que los diputados se exhiban y realicen actos de protagonismos. Una vez que termina la jornada de las comparecencias no existe seguimiento de lo que han planteado durante el evento.
Así que es el momento para empezar a hacer un cambio en el diseño institucional de comparecencias.
Es necesario que se cambie dicho formato para que los legisladores realicen la parte de control y de esta manera se logre tener mayor conocimiento de lo que realiza el Ejecutivo.
Sería muy conveniente que el legislativo empezara promoviendo auditorias de desempeño, administrativas, y desde luego, contable. Para saber que tanto las dependencias como las entidades están trabajando desde los cauces de la transparencia, eficacia y eficiencia.
Sólo así se podrá saber con exactitud los avances y resultados del aparato administrativo.
Cuando Manlio Beltrones, era un político activo y siendo Senador planteó los gobiernos de coalición. Estamos hablando de gobierno, no de coaliciones electorales. Sino de conformar un gobierno donde confluyan diferentes fuerzas políticas, una especie de cohabitación. En el cual gobiernan y se integran a la estructura de la administración pública y de esta manera se podría medir la eficacia y eficiencia en cuanto a los partidos políticos gobernantes. Aunque se podrían candados para que no se convirtieran las entidades o dependencias en cotos de poder de los partidos políticos, aunque sería inevitable.
Si lo vemos en la práctica podemos darnos cuenta que muchos de los personajes cambian de partido y se adhieren al presidente en turno. Sería lo mismo, nada más que en lugar de personajes serían los partidos políticos a quienes se les cedería ese espacio.
Porque en las coaliciones electorales los partidos se coaligan para contender en un proceso electoral, ambos partidos obtienen votos la suma de los partidos unidos les favorece con el triunfo. Pero una vez que ganan el que se queda con todas las canicas es el partido con mayor militancia. Y en cambio, el otro partido que apoyó en el triunfo, alguno de sus personajes se podrá integra a la administración pública teniendo que renunciar muchas veces a su militancia partidista.
Cuando no habría necesidad de renunciar, simplemente, actuar como militante de tu partido que realizas una función en la administración pública. Esto ocurre con mucha frecuencia en el servicio exterior, sólo los que pertenecen al grupo gobernante pueden acceder a cargos diplomáticos, pero para los que no son militantes del partido ganador no tienen la más mínima posibilidad de integrarse al cuerpo diplomático.
Oportunas:
Con esto de que llueve con ganas en la ciudad, algunas calles se están deteriorando al extremo de irse formando hoyos, lo cual provoca averías a los vehículos. Por lo que es necesario poner un poco de chapopote. ¿Se podrá?