Serpientes y escalera - What if…?

El panorama pinta bien para Morena rumbo a las elecciones del 2024. Peeeero…

What if…?

A poco más de un año de la elección de gobernador en Morelos los números son favorables para el Movimiento de Regeneración Nacional; la distancia que le saca Morena a una alianza opositora es de entre quince y veinte puntos, razón por la cual muchos actores de la 4T suponen que tienen la victoria en sus manos, no importa quien sea el abanderado o lo que ocurra en el proceso interno de selección de candidato. Ante la falta de diálogo entre aspirantes locales, el comité nacional del partido puede imponerse y decidir unilateralmente quien será su abanderado ¿Qué pasaría en ese escenario?

La ventaja del partido gobernante respecto a sus opositores es importante, pero no es la primera vez que vemos algo así en la víspera de una contienda sexenal: la elección del año dos mil comenzó con una cómoda ventaja a favor del Partido Revolucionario Institucional y su candidato Juan Salgado Brito, pero al final las cosas fueron diferentes y Acción Nacional se alzó con un triunfo apabullante. Algo similar ocurrió en el proceso electoral del año 2012, cuando el PRI con Amado Orihuela superaba por 17 puntos a sus contrincantes y perdió por 11 puntos. ¿Un ejemplo más? En el 2021 el candidato de Morena Jorge Argüelles inició con una comodísima ventaja de 17 puntos que diluyó en 45 días.

El panorama del Movimiento de Regeneración Nacional de cara a las elecciones del 2024 es claro: tienen ocho candidatos, 5 hombres y tres mujeres, todos aspiran a relevar en el cargo a Cuauhtémoc Blanco o en su “peor escenario” ocupar uno de los dos escaños al senado de la república. Cada aspirante sabe que esta es su única oportunidad de ser postulados a la gubernatura; pase lo que pase, en el 2030 no serán ellos los precandidatos.

En el abanico electoral nacional Morelos es un estado ganable para Morena y ello debe observarse más allá del comentario simplista de que “somos un estado pequeño que no les interesa en México”. Falso: la de Morelos es una de 32 gubernaturas y en independencia del tamaño, población y ubicación geográfica, se trata de una gubernatura, lo cual es de suma importancia para cualquiera que sea presidente de México.

Tomando como base la manera como Morena ha seleccionado las candidaturas de otros estados a lo largo del sexenio obradorista es posible advertir lo que puede ocurrir en el caso de Morelos; las encuestas son el parámetro formal a través del cual el partido define a los candidatos, son, las encuestas, una herramienta en la que el presidente Andrés Manuel López Obrador confía plenamente porque le muestran quienes de los distintos aspirantes tienen “pueblo”.

Si algo se ha visto en los procesos de selección en otros estados es que más allá de la relación o compromiso que pueda tener algún precandidato con la dirigencia nacional o con el propio presidente de México, el primer filtro que deben superar para ser postulados es que tengan “pueblo”; hasta ahora no se ha visto que Morena mande figuras que no están bien posicionadas o carecen de legitimidad social. Es ahí donde el presidente hace valer sus creencias y su investidura: lo hizo en Oaxaca con la senadora Susana Harp y recientemente en Coahuila con Ricardo Mejía, ambos cercanos a él, poseedores de su afecto, pero no salieron bien en la encuesta y por tanto no fuero candidatos.

Las encuestas de Morelos se comenzarán a levantar después del proceso electoral en los estados de México y Coahuila, aunque la definición de la candidatura podría darse a finales del año o principios del 2024, después de que se conozca al abanderado presidencial, lo que podría ocurrir allá por el mes de agosto. Desde hace tiempo los precandidatos morelenses andan movidos, metidos de lleno en el trabajo de tierra y empleando diversos caminos para posicionarse. Lo único que nadie hace es hablar con el otro.

Es aquí donde la historia puede modificar lo que plantean las encuestas: si los actores políticos locales no son capaces de ponerse de acuerdo entre ellos para llegar al proceso de selección interna en un ánimo de civilidad y acuerdo, lo que sucederá es que Morelos se volverá el comodín en materia de género y ello derivaría en que desde México se tome la decisión de postular a una mujer, sin importar el posicionamiento de cada uno de los contendientes.

Supongamos por un momento que eso ocurre, es decir, que ante la falta de diálogo de los políticos locales la decisión se vuelve nacional y se toma en función de lo que ocurra con las candidaturas de otros estados. Si eso sucediera lo más probable es que en Morelos se postule a una mujer y solo hay tres damas en la carrera: Margarita González Saravia, Cecilia Rodríguez y Lucía Meza.

Hay que ubicar las características y circunstancia de las tres mujeres que aspiran a gobernar el estado: Margarita González Saravia fue funcionaria en el gobierno de Cuauhtémoc Blanco, es directora de la Lotería Nacional y fundadora de Morena; por razones de su empleo actual tiene relación con el gabinete federal, pero no con el presidente Andrés Manuel López Obrador.  

Cecilia Rodríguez es secretaria del gabinete estatal, es la aspirante que más tarde se incorporó a la carrera por la gubernatura y aunque ha ganado terreno, parece difícil que logre ubicarse en buena posición al momento que se levante la encuesta. La secretaria es una mujer preparada, con carisma, pero dado el poco tiempo que lleva en precampaña necesita hacer mucho más que cualquiera de los otros contendientes.

Lucía Meza es senadora de la república, pertenece a la bancada de Morena, pero no es militante del partido; la dama no es una figura obradorista, por el contrario, se le considera pieza de Ricardo Monreal y a través de Pedro Haces intentó crear un nuevo partido, Fuerza por México, que pretendía ser una alternativa distinta a Morena. De las tres, Lucía Meza es la mejor posicionada, pero también a la que menos confianza le tendría el presidente, el partido y el gobernador, porque ya demostró que a la primera oportunidad les jugaría la contra.

Cualquiera de las tres mujeres que aspiran a gobernar Morelos en el 2024 tienen habilidades y méritos, pero de acuerdo con las propias encuestas que colocan a Morena en ventaja, ninguna de ellas tiene el posicionamiento necesario para ganar solas, es decir, requieren de la fuerza que les pueda brindar el partido y del apoyo de los precandidatos varones.

Veamos el escenario: si la candidatura a la gubernatura de Morelos es para una mujer y una de las dos posiciones al senado también es para una mujer, a los cinco hombres que compiten les correspondería un solo espacio al senado; eso si no lo ocupa Ulises Bravo, el hermano del gobernador y presidente legítimo del partido, quien anda en campaña de cara a esa posición. Si eso sucediera los cinco precandidatos a la gubernatura tendrían que conformarse con un escaño legislativo o una alcaldía, lo cual les permitiría mantenerse en la actividad política, pero los alejaría de la gubernatura en el 2030.

Varias veces en los procesos electorales hemos visto como los números de las encuestas cambian derivado de los conflictos internos; en este caso no solo es notoria la falta de diálogo entre los aspirantes de Morena, también es visible la nula operación por parte del partido. El proceso de selección de candidato del Movimiento de Regeneración Nacional en Morelos está libre, sin reglas, sin diálogo y sin árbitro. ¿Así pueden salir bien las cosas?

¿Qué sucedería si desde México se toma la decisión de que en Morelos la candidatura sea para mujer? ¿Cómo se procesará esa decisión con los precandidatos? ¿Qué les ofrecerán a cambio de no participar por ese espacio o los escaños al senado? ¿Cómo harán para que se sumen de verdad a campaña de la candidata y sobre todo, cómo convencerán a los seguidores y a las estructuras de los precandidatos de hacer el trabajo por alguien más?

No es secreto que a algunos precandidatos de Morena en Morelos se les han acercado dirigentes locales y nacionales de oposición, que les han ofrecido la candidatura al gobierno estatal y hasta una de las dos posiciones al senado. Ninguno hasta ahora ha aceptado la propuesta, pero algunos han dejado la puerta abierta en espera de ver lo que ocurrirá en su partido.

Cualquiera que sea el elegido (a) del Movimiento de Regeneración Nacional generará un rompimiento interno, porque no hay forma de que todos queden contentos o a todos les toque una posición.

El reto es que el rompimiento no sea tan grande que ponga en riesgo el triunfo.

·         posdata

Los asesinatos se han vuelto cosa de todos los días en el estado y particularmente en la capital; no hay semana que no se reporte una ejecución o un ataque armado con víctimas mortales de por medio.

La estrategia del Mando Coordinado de Policía no sirve, no da resultados ni garantiza la seguridad de la población; a eso hay que añadir la incompetencia de la policía de Cuernavaca, dedicada más a la extorsión de los ciudadanos que a la prevención del delito.

El problema de la violencia no está solo en el constante derramamiento de sangre, sino en la normalización de estos hechos: a nadie le incomoda ya que todos los días se reporten más muertos o nuevas agresiones, todo queda en algunos comentarios en redes sociales, reclamos y maldiciones al gobierno, pero nada más.

Vivimos el peor momento en materia de inseguridad y violencia, pero paradójicamente los gobiernos están en el momento de mayor conformismo social. Si la inconformidad de la gente se ubica solo en las redes sociales, nada va a cambiar, por el contrario, la situación empeorará.

·         nota

Otra balconeada a la diputada Andrea Gordillo por gastos superfluos pagados por el congreso local; ahora exhiben facturas por 1.6 millones de pesos.

Parafraseando al viejo comercial de la Lotería Nacional: “A ella lo que le gusta es la lana”.

·         post it

El obispo de Cuernavaca Ramón Castro anunció una nueva caminata por la paz en Morelos; será presencial ahora que la pandemia de covid ha terminado. Así lo informó el líder de la iglesia católica:

“De las caminatas de treinta y cinco mil personas, como nos afectó la pandemia y lo estuvimos haciendo a través de los medios de comunicación, yo creo que retomarla no va ser igual; no vamos a tener la misma cantidad, seguramente porque algunas personas estarán con cierto temor, pero creo va a ser algo que va a repercutir como lo ha hecho la mayoría de las caminatas. Con diez mil estaríamos contentos… Este año tenemos planeado solamente así, pero está la propuesta de que lo hagamos en las diferentes áreas de Morelos, pero nosotros tenemos que organizarlas… No podemos negarle la participación de nadie, todo el mundo está invitado, pero ciertamente si alguien quiere sacar provecho político de ello trataremos de evitarlo, por eso no se pueden llevar invitaciones particulares, sobre todo de índole político”.

·         redes sociales

A través de las redes sociales se difundió la golpiza que los cadeneros de un bar en la avenida San Diego de Cuernavaca propinaron a varios jóvenes. La golpiza fue brutal y con un bastón táctico.

En otros tiempos este tipo de cosas traería consecuencias. En el Cuernavaca de hoy seguramente no pasará nada.

Comentarios para una columna optimista: eolopacheco@elregional.com.mx

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