Se profundizan las acciones en contra de violencia a niñas, adolescentes, mujeres
Como cada 25 de mes, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) conmemora el Día Naranja, una iniciativa que busca visibilizar y sensibilizar a la sociedad sobre la violencia que viven niñas, adolescentes y mujeres, informó Dulce Ivonne Velázquez Olivares, Directora General del Centro Estatal de Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia con Participación Ciudadana.
Refirió que, en esta fecha, SSPC Morelos realiza acciones concretas, colectivas y permanentes para prevenir, atender y erradicar todo tipo de violencia, se promueven espacios seguros, igualitarios y libres de discriminación.
En tal sentido, Velázquez Olivares indicó que este día se realizó el evento, al cual acudieron mujeres integrantes de las distintas Redes Constructoras de la Paz de todos los municipios del estado, así como personal de la Secretaría, al “Taller de Lengua de Señas Mexicanas”, impartido por Déborah Macedo y Perla Alarcón.
Durante esta jornada las y los participantes adquirieron herramientas básicas para comunicarse con personas sordas, fortaleciendo así la inclusión y el respeto a las personas con discapacidad auditiva.
Asimismo, se contó con la participación de la activista Samantha Arellanes Balderas, quien impartió la conferencia "Mujeres Diversas", orientada a sensibilizar sobre la importancia de reconocer y respetar la diversidad de identidades y realidades de las mujeres, promoviendo una cultura de inclusión y no discriminación.
Con estas acciones, la SSPC Morelos reafirma su compromiso de impulsar iniciativas que contribuyan a la prevención de la violencia y al fortalecimiento de la igualdad sustantiva, lo que permitirá avanzar hacia una sociedad más equitativa, incluyente y respetuosa de los derechos de las mujeres.
En México, la violencia contra niñas y adolescentes es un tema alarmante. Según UNICEF, 6 de cada 10 mujeres adolescentes han sufrido algún tipo de violencia a lo largo de su vida. Esto puede incluir violencia emocional, física, sexual o económica, y puede provenir de personas cercanas o desconocidas.
La violencia de género que enfrentan las niñas y adolescentes tiene particularidades que no siempre quedan manifiestas cuando se habla de violencia contra la mujer o la niñez. Visibilizar estas experiencias y riesgos permitirá identificar necesidades de protección y atención específicas para ellas.
Las niñas y adolescentes demandan vivir libres de violencia y ser tratadas sin discriminación. También piden educación sexual integral y la oportunidad de participar y decidir sobre las cuestiones que les atañen. Además, necesitan justicia climática para crecer y ser visibles en las estadísticas.
En México, se han implementado programas para prevenir y eliminar la violencia de género. El programa "Buen Trato" de UNICEF se enfoca en prevenir la violencia en el ámbito familiar, escolar y comunitario. También existen servicios especializados para atender a las niñas y adolescentes que han enfrentado violencia.
Según datos del INEGI, en 2020, las mujeres representaban el 49.3% de la población infantil y adolescente en México. Sin embargo, eran el 92.3% de las víctimas de violencia sexual atendidas en hospitales del país. Esto muestra una clara desigualdad en la que las niñas y adolescentes son más propensas a sufrir violencia.
La situación de los derechos de las mujeres de entre 0 y 17 años en México ha empeorado en algunos indicadores. El número de homicidios y violencia física contra niñas y adolescentes ha aumentado en los últimos años. Además, el porcentaje de mujeres que han sido víctimas de discriminación y acoso escolar también ha aumentado.
El acceso a servicios de salud y seguridad social es limitado para muchas niñas y adolescentes en México. Según CONEVAL, en 2022, el 42% de las mujeres de 0 a 17 años presentaba carencia por acceso a servicios de salud. Esto corresponde a 7.7 millones de niñas y adolescentes.
La violencia en línea también es un tema preocupante. Según INEGI, 4 de cada 10 mujeres de 17 años ha sido víctima de ciberacoso. Existen programas para navegar de forma segura en internet y prevenir el ciberacoso.
Las niñas y adolescentes con discapacidad también enfrentan desafíos adicionales. Según INEGI, en 2020, 1.2 millones de mujeres de entre 0 y 17 años tenían alguna limitación o discapacidad. Esto corresponde al 6.5% de las mujeres de 0 a 17 años.
La pobreza y la exclusión social también son factores que aumentan el riesgo de violencia para las niñas y adolescentes. Según CONEVAL, en 2022, el 45.9% de las mujeres de 0 a 17 años vivía en situación de pobreza. Esto corresponde a 8.4 millones de niñas y adolescentes.
Las niñas y adolescentes indígenas y afrodescendientes enfrentan desafíos adicionales debido a la discriminación y exclusión social. Según INEGI, en 2020, 865.5 mil niñas y mujeres adolescentes hablaban una lengua indígena. Esto corresponde al 5.4% de la población de mujeres de entre 3 y 17 años del país.
En cuanto a la participación y el acceso a la justicia, las niñas y adolescentes en México tienen derecho a recibir información y a que su opinión sea escuchada en todo momento y en toda decisión que les afecte. Desde UNICEF se impulsan espacios de participación como U-Report, donde las niñas y adolescentes pueden expresar sus opiniones y ser escuchadas.