Reforma electoral revela polarización
Pretendían aumentar el número de parlamentarios: de 20 a 24
La mayoría de los cabildos votó en contra de este nuevo ordenamiento
Juan Lagunas
La reforma comicial, que fue rechazada por los ediles (instituidos como Constituyente Permanente), evidenció una fisura en la 54 Legislatura. En perspectiva, Banca Nieves Sánchez Arano dijo que “la paridad y los pueblos indígenas nunca deberán ser monedas de cambio de ningún poder”.
Asimismo, en un documento, la congresista -por las siglas del Partido Nueva Alianza- manifestó que “con un amplio sentido de responsabilidad ética, política y social, y en concordancia con sus respectivos conciudadanos, la mayoría de los presidentes municipales, junto con sus cabildos, votaron en contra del dictamen emanado de este recinto legislativo”, por el que se pretendía una reforma político-electoral.
De igual forma, reconoció que imperó la “inteligencia” de los ediles, así como su conducción -para separar el tema de paridad y grupos indígenas (“importantes y prioritarios”) con la reforma electoral que iba incluida de forma “ruin” en el mismo dictamen a votar-.
Sumó su voz a la de “miles” de personas que desean que los poderes Legislativo Ejecutivo y Judicial, sean “promoventes” de iniciativas para coadyuvar con los habitantes del estado; sobre todo, quienes enfrentan la pandemia por el virus covid19: “desde los hospitales, sus trabajos y hogares, conviviendo con la enfermedad o alejándose de ella”.
Con base en el documento correspondiente (que obra en poder de este rotativo) se determinaba que el diputado José Casas González proponía modificar diversas disposiciones del Código Electoral local para que, en lugar de una lista de candidatos a diputados por el principio de representación proporcional, sean dos, una de hombres y una de mujeres; esto “con el propósito de lograr una efectiva paridad de género en la integración de la Legislatura, además de suprimir el derecho de los candidatos a presidente municipal y síndico a competir como primer y segundo regidor en la misma elección”.
Por su parte, la parlamentaria Dalila Morales Sandoval pretendía diversas disposiciones del Código Electoral local y de la Ley de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia en materia de paridad de género y de violencia política contra la mujer en razón de género.
Héctor Javier García Chávez, de Morena, aducía modificar diversas disposiciones al mismo ordenamiento para que, en primer lugar, se elimine el principio de “sobrerrepresentación” en los cabildos y agregar la facultad de que el IMPEPAC observe el principio de paridad de género en su integración.
Y, en suma, preveían aumentar los diputados: de 20 a 24.
