Reconoce Ojeda que fallaron los protocolos de seguridad en penal
Se investiga cómo es qué pasó y si hubo colusión de autoridades penitenciaras, informó
Autoridades penitenciarias y de la CES no aplicaron un operativo para detectar armas tras primer motín
Después de la jornada violenta en el penal de Atlacholoaya de la semana pasada que dejó siete reos muertos, el Gobierno del Estado reconoció que fallaron los protocolos de seguridad dentro de ese reclusorio.
El secretario general de Gobierno, Pablo Ojeda Cárdenas, dijo que se investiga cómo es que fallaron los protocolos y si hubo colusión de autoridades penitenciaras.
Pero además reveló que las autoridades penitenciarias y de la Comisión Estatal de Seguridad (CES) “fallaron “porque no aplicaron un operativo en el penal para detectar armas, después del primer motín de martes 29 de este mes, donde murió un reo.
También reconoció que no existe una información oficial de lo que sucedió el pasado martes y miércoles en el interior del Centro de Reinserción Social (CERESO), debido a que aún no se ha realizado la reconstrucción de los hechos “minuto a minuto”, de lo que ocurrió.
“Hay que hacer una reconstrucción de todos los hechos, minuto a minuto de lo que ocurrió durante los dos días que hubo la riña dentro del penal, ver cuáles son los protocolos que fallaron, ver que cómo es que un día hubo una riña y no se ha hecho la requisa esa misma noche y al día siguiente hubieran existido armas en el penal”, dijo en entrevista.
Aunque tras los hechos violentos de la semana pasada en el CERESO, dijo Ojeda Cárdenas que se realizó un operativo donde se decomisaron más de 50 armas, en su mayoría punzocortantes, pero detalló que en los operativos de los últimos meses se han confiscado 100 teléfonos celulares.
Sobre la permanencia del coordinador de Reinserción Social, Jorge Israel Ponce de León Bórquez, el funcionario estatal confirmó que está en evaluación su trabajo.
También confirmó que solicitaron a la federación “ayuda” para el traslado a penales de máxima seguridad del país de los 36 reos que presuntamente fueron los que provocaron las riñas en el penal el pasado martes y miércoles, y que actualmente están en la cárcel distrital de Jonacatepec.
Finalmente, dijo: “son 36 reos que están temporalmente en el penal de Jonacatepec en espera de ser trasladados a penales de máxima seguridad de diferentes estados del país, tenemos que pedir a la Federación que nos ayude, nos auxilie en recibir a este tipo de figuras en centros de máxima seguridad para mantener el orden y la estabilidad al interior de los Ceresos”.