Por el éxodo a EEUU, aquí faltan cortadores de caña
Jorge Rafael Sánchez 
Cuautla, Mor.- Los ingenios de Morelos, Central Casasano, de Cuautla y Emiliano Zapata, de Zacatepec, enfrentan una escasez de cortadores de caña de azúcar que ha preocupado a las 2 organizaciones más representativas de ambas factorías, la Unión Local de Productores de Azúcar (ULPCA) y la Asociación de Productores Cañeros (SPC) pertenecientes a la Confederación Nacional de Propietarios Rurales (CNPR).
El problema, según los pocos cortadores de la vara dulce, es que la mayoría ya no quiere dedicarse a ese oficio y prefieren migrar a los Estado Unidos de Norteamérica, en busca de mayores oportunidades de trabajo y mejor pagados. Rosendo Tiempos cortador del estado de Puebla, señaló que sus hijos ya no quisieron seguir en el corte de la caña de azúcar, y decidieron irse a probar suerte “al otro lado”, porque es mucha la necesidad que se tiene.
Señaló que el corte de la tonelada de caña se les paga en un promedio a 35 pesos, y año con año ha bajado la producción, cada vez son menos toneladas, este año la producción fue muy escasa por falta de lluvias. Cuando en otros periodos de zafra sacaban de siete a ocho camiones de 15 a 18 toneladas, ahora sólo son 4 a 6 toneladas.
Indicó que aunque las organizaciones de cañeros cañeras les garantizan un cuarto como albergue, servicios como agua potable, baños, energía eléctrica y en algunos albergues tienen una cocina comunitaria; esto no es suficiente, ya que los jornaleros deben asegurar la compra de sus alimentos, escuela de sus hijos, productos de aseo personal, entre otras cosas.
Por su parte, Ricardo García quien lleva años dedicándose al corte de caña con su familia, de una localidad del estado de Puebla, reconoce que sus hijos prefieren migrar “al norte”, y no seguir con este oficio. Aunque en otros años, abundó que representaba una buena fuente de ingresos, actualmente los cortadores no perciben más de mil a mil 200 pesos.
“Ellos (sus hijos) buscan que su familia tenga mejores oportunidades, y nos guste o no, solo del otro lado, se puede ganar más; al final es el mismo trabajo, duro, de sol a sol, pero allá se gana en dólares y más, no como acá. Por eso, son cada vez más los jóvenes que buscan entrar al otra lado de la frontera norte, se van a fregar, pero seguro van a ganar más para enviar a sus familias”, recalcó
