Observador político - La descomposición social

El país se está cayendo a pedazos por la inseguridad. Y Morelos no es la excepción. Tristemente, los secuestros, la extorsión, el cobro por derecho de piso, los asaltos a transeúntes, a casas habitación y hasta en restaurantes es ya cotidiano. El tema es grave, preocupante. Los asesinatos se registran todos los días, a cualquier hora, ya no importa si es de día o de noche y lo peor, hasta con las familias y los menores empiezan, para desgracia, ser parte de las cifras negras.

AGOBIA A TODOS LA INSEGURIDAD.- Las declaraciones de nuestros gobernantes a nivel nacional y estatal son la constante: “Vamos a ir contra todos”, “vamos a combatirla”, “no les vamos a fallar”, “no vamos a pactar con la delincuencia”, lo malo, lo triste y decepcionante es que cada día hay personas asesinadas y en su mayoría, todos los delitos quedan en la impunidad. Esto significa, que quienes cometen uno o más asesinatos continuarán con esa encomienda porque andan libres y nadie los detiene. El panorama es desolador, triste, preocupante y alarmante. Lo peor: no se ve para cuando hayan resultados positivos de reducir la inseguridad.

Y la situación la vivimos todos. Nuestra forma de vida la hemos tenido que cambiar, en muchos de los casos, en gran medida por la muy lamentable descomposición social en la que estamos viviendo en México y en Morelos. La vida productiva en las noches se está acabando en gran medida, por el temor fundado de la gente de no salir por temor a ser presa de la delincuencia y en segunda, porque muchos negocios, establecimientos que son presa del hampa también han decidido cerrar sus puertas. Muchos locales han decidido bajar sus cortinas ante la incertidumbre de no poder hacer nada y de no querer trabajar para las diversas células delictivas. Y pese a todo ello, la autoridad dice que las cosas van bien y que combatirán a las bandas criminales pero solo lo hacen de forma superficial porque en los hechos sucede todo lo contrario.

TURBULENCIA MEDIÁTICA.- Las diferentes organizaciones han denunciado los casos de jovencitas que para desgracia se siguen desapareciendo, como se ha difundido en las redes sociales referente a varias colonias como Alta Vista, Satélite y Acapatzingo la gente habla de “toque de queda”, que aún que no se da ni se confirma por parte de las corporaciones policíacas, sus habitantes con el simple hecho de resguardarse a temprana hora y dejar de hacer sus actividades por la noche, contribuyen a que esa imagen negativa se mantenga. Este tipo de acciones en lugar de ayudar provocan incertidumbre y temor no solo entre la sociedad sino en los empresarios que ven como la gente ha dejado de acudir de manera importante a sus establecimientos ocasionando afectaciones económicas severas. Urge una respuesta inmediata de parte de los titulares de la Fiscalía General del Estado y la Comisión Estatal de Seguridad para que la situación que se ve se les salió ya de las manos por la forma torpe y superficial con la que afrontan la turbulencia mediática provocada por la lamentable tragedia de la inseguridad. Y mientras los jefes policiacos, los diputados y los gobernantes andan a bordo de unidades blindadas, la sociedad tiene que andar caminando y viviendo el terror que representan las calles en la actualidad.

PREVENCIÓN DEL DELITO.- EN tanto el Consejo Nacional de Seguridad Privada, en su momento hizo la presentación del libro intitulado: “Cómo poner un alto a la inseguridad en México”, en la que presenta cinco propuestas para la tranquilidad de la ciudadanía, es decir, mediante un lenguaje sencillo y concreto, proponen estrategias específicas para disminuir los índices delictivos aunque hasta el momento pese a todos los esfuerzos con la incorporación de la Guardia Nacional, no han tenido respuestas que la sociedad demanda.

Empero, los esfuerzos que se hacen se deben de enfocar en lo local y estar centrados en los ciudadanos, porque son quienes conocen las amenazas que afectan cada rincón y a cada vecino del barrio y es ahí donde se debe de reforzar el trabajo policíaco. Pese a todo, es fundamental que el gobierno del estado provea y garantice la seguridad a la ciudadanía de forma más efectiva.

¿Pero y cuáles son los argumentos para reducir la inseguridad? Hay algunos elementos que argumentan los especialistas en el tema para combatir la inseguridad y en este punto, los alcaldes bajo ninguna circunstancia no pueden exonerarse de responsabilidades y delegar el control de la delincuencia a otros. Lo que significa que el liderazgo por parte de las autoridades locales es esencial y fundamental a pesar de que sigan argumentando que existe un decreto como se generó actualmente entre la capital con el Estado, pero además, hay otros municipios que requieren dar muestras de que son un gobierno que escucha el clamor de sus ciudadanos y trabajar de manera efectiva para tener una mayor seguridad. Lo cierto, es que todos los sectores de la población requieren urgentemente de unificarse, reunirse y de manera coordinarse trabajar para lograr lo que tanto anhela y demanda la sociedad: reducir el crimen y la violencia que hoy está desatada en Morelos.

Por lo pronto se requiere mejorar la calidad de un debate muy simplificador que sólo aborda el tema policialmente, manteniendo la discusión encerrada entre cuestiones como hacer imputables a los niños, crear cárceles especiales para niños y adolescentes, presionar a los jueces por mayores penas y gastar más en seguridad.

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