Juego de Manos - El hoyo

Es oficial, llegamos a la Fase 3, el punto máximo de contagios de esta contingencia sanitaria. En este momento se verá reflejado nuestro esfuerzo y responsabilidad (o carencia de ambos) durante las semanas pasadas. Seremos testigos de un aumento acelerado y sin precedentes de casos confirmados de coronavirus en el país y, lamentablemente, con ello aumentarán también las defunciones provocadas por el mismo. Lo fundamental ahora es seguir con las medidas de prevención anunciadas para que el índice de infección se reduzca y, con ello, se prevenga la saturación del Sistema Nacional de Salud.

Ahora bien, a pesar de haber alcanzado la cúspide, no debemos perder la costumbre de tener un ojo siempre viendo hacia el futuro. Así como estuvimos pendientes a la llegada de esta última etapa, tenemos que anticipar lo que vendrá después de ella.

El covid-19 nos ha obligado a transformar la manera en que nos desenvolvemos en nuestra sociedad. Rutinas y responsabilidades se han modificado y este contexto, evidentemente, ha obligado a los negocios a adaptarse. Con el distanciamiento social, las y los empresarios de México se han visto en la necesidad de hacer uso de nuevas herramientas para ofertar sus productos y desempeñar sus labores. Ello implica, necesariamente, la actualización y el uso de tecnologías que, quizá, no habrían considerado utilizar anteriormente. Esto en primera instancia puede parecer favorable, pero ¿lo es? Antes de dar respuesta a ello debemos tener algunas cosas presentes.

De acuerdo con cifras de la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de las Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) 2019 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), se estima que el 70.1% de la población de seis años o más es usuaria de Internet (alrededor de 80 millones de personas). Esta cifra puede analizarse según la localidad de las personas, con lo que observamos que el 76.6% de la población urbana es usuaria de Internet, porcentaje que contrasta con el 47.7% de las personas que habitan en zonas rurales.

En cuanto a la distribución por edades, los grupos de 18-24 años, 12-17 años y 25-34 años registraron la mayor proporción de usuarios de internet, con una participación del 91.2%, 87.8% y 86.9% respectivamente. Por otro lado, el grupo poblacional de 55 y más años registró el menor porcentaje de usuarios respecto a su población con 34.7%.

Esto quiere decir que, a pesar de los avances que se han alcanzado en cuanto al acceso a las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC’s), sigue existiendo una brecha marcada entre desarrollo urbano-rural y entre las nuevas generaciones frente los grupos de edades avanzadas. Ello, a su vez, implica una situación privilegiada para sobrellevar al contexto presente por parte de los primeros, mientras que los segundos se ven orillados a hacer un doble esfuerzo por adaptarse e igualar (sin mucho éxito) las condiciones favorables natales que tiene el otro grupo.

Cuando todo esto termine y podamos salir de nuevo, podemos esperar un cambio en la manera en que algunas pequeñas y medianas empresas ofertan y entregan sus productos o servicios. Asimismo, existirá una actualización en el uso de las tecnologías por parte de algunos negocios. Herramientas como redes sociales, apps y medios de entrega encontrarán nuevas manos que las utilicen; sin embargo, la resiliencia de los comercios en este momento de crisis no se define únicamente por el esfuerzo de las personas, sino por sus condiciones anteriores. La comodidad de estos nuevos mecanismos para los consumidores no debe nublar nuestra vista hacia aquellos comerciantes incapaces de hacer frente a este nuevo paradigma.

Con la actualización de los negociosos viene el rezago de aquellos que no tienen acceso a las nuevas tecnologías debido a una brecha multidimensional. Tenemos que pensar en aquellos que se están quedando atrás.

En estos momentos, las condiciones preexistes están jugando un papel protagónico en la capacidad de las pequeñas y medianas empresas por adaptarse a las circunstancias y, en algunos casos, sacar provecho de ellas. Hay un hoyo entre nosotros y este, siempre, ha sido clave definir en qué nivel en que nos encontramos. Obvio.

Los nuevos Súper

Con motivo del día del niño, Susana Distancia anunció que la conferencia nocturna de covid-19 del próximo jueves 30 de abril estará enfocada exclusivamente en las niñas y niños de México. Esto significa que las cifras, que se acostumbran a dar todos los días a las 7:00 pm, se difundirán en los medios de la Secretaría de Salud, y el espacio completo de la conferencia será utilizado para responder a preguntas que la infancia mexicana envíe al subsecretario López-Gatell.

Esta dinámica comenzó este fin de semana cuando las y los niños interesados enviaron un video de 30 segundos o un dibujo que contenía preguntas o anécdotas, acerca de como se sienten durante esta contingencia. Este material será revisado y seleccionado por la Secretaría de Salud, de acuerdo con la calidad o con la frecuencia que ciertas temáticas se presenten, y se mostrará en vivo durante la conferencia. De igual modo, si así lo desean, las y los niños podrán interactuar con el Dr. López-Gatell a través de una videollamada.

Este fenómeno es interesante, porque converge la atención del sector salud hacia la población de menor edad del país durante una contingencia sanitaria (algo que en sí ya es inusual) con el crush nacional hacia Hugo López Gatell. Esto, si bien podría tomarse a modo de risa, es un fenómeno interesante que debemos seguir de cerca. A paso seguro el subsecretario se está haciendo de la simpatía de la población mexicana. Hay que observar con atención este ascenso ya que, a pesar de que el Doctor a manifestado su desinterés por la política, poco a poco se va haciendo de sus mañas y esto, para bien o para mal, despertará malas miradas llenas de interés en su contra.

Por cierto

En la ciudad de Nueva York se realizaron protestas para exigir que el gobernador del estado, Andrew Cuomo, levante las medidas de prevención de contagio frente a la pandemia de covid-19. Con caravanas de automóviles, letreros que presentan versos como “Cuomo dictador” y “Trump 2020”; los ciudadanos exigen que sus vidas regresen a la normalidad.

En entrevistas, algunos manifestantes argumentan que la mortalidad y amenaza que representa el covid-19 es mucho menor del que se señala en la agenda pública, que existen grupos como los Illuminati detrás de la contingencia o que se trata de un mecanismo de control social por parte del gobierno. Sea cual sea la razón, estas personas protestan en contra del gobernador y del virus (¿?) para que, dentro de otras cosas, puedan por fin salir a cortarse el cabello. La justicia social ha encontrado a sus nuevos abanderados.

El sector republicano, que ha sido fuertemente asediado y descalificado desde las elecciones anteriores, se tropieza nuevamente gracias a sus integrantes más ignorantes. A pesar de posicionarse como los posibles vencedores de las próximas elecciones presidenciales, el sello de “Burro” que algunos han estado intentando borrar parece haberse hecho con tinta indeleble. Pónganles cero.

Para preguntas, dibujos o confesiones; te dejo mi correo: 

diegopachecowil@gmail.com