EL CRECIENTE MONSTRUO DE LA TRATA
En opinión de Lorena Elizabeth Castillo
El fenómeno no es nuevo y tiene, en cambio con peligrosas vertientes, sobre cuyas consecuencias es necesario concientizar a personas, sociedad y a las mismas autoridades. Hablamos de la trata de personas de la cual, hoy día, más de 12 millones de personas son víctimas a nivel mundial.
Además de transgresión a los derechos humanos, la trata de personas significa el reclutamiento, transporte, transferencia, albergue o recepción de personas, mediante la amenaza o el uso de la fuerza u otras formas de coerción, secuestro, fraude y engaño.
Es también abuso de poder o de una posición de vulnerabilidad o de dar o recibir pagos o beneficios, para lograr el consentimiento de una persona que tiene control sobre otra persona con fines de explotación.
Sobre la materia, este jueves 24 de noviembre, en el Instituto de la Mujer de Cuernavaca (IMC), como parte de noviembre Mes Naranja, realizaremos una jornada de revisión de acciones preventivas, así como las medidas necesarias para atacar este flagelo que se conforma también como un componente de violencia contra las mujeres.
Para ilustrar la magnitud del problema revisemos algunas cifras del fenómeno en México, ya que la trata de personas es un crimen que va en preocupante aumento.
En el primer semestre de 2022 se reportaron 494 víctimas de trata, lo que implica un incremento de 24% respecto del mismo periodo de 2021, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP)
El organismo resalta que entre enero y mayo de 2022, se tenía el registro de 397 víctimas, 14 por ciento mismos meses de 2021, pese a la crudeza de las estadísticas, la realidad es más grave, ya que “esas cifras son sólo una parte de la realidad, pues muchas veces no se denuncia el delito”.
A reserva de indagar datos actualizados en Morelos y, específicamente, en Cuernavaca, es necesario insistir el fortalecimiento de las acciones de prevención, atención y erradicación y, sobre todo, en lo que debe constituirse como la educación y cultura preventiva.
Es decir, padres y madres, debemos estar alertas -sin caer en la paranoia- e instruir a hijas e hijos en hábitos como el de no atender a llamados de extraños, evitar lugares de riesgo , departir en ambientes y expendios de sustancias peligrosas o adulteradas, las cuales son la puerta a la privación ilegal de la libertad y secuestros
Para abundar en datos de alarma, entre 2018 y 2020 sumaron mil 859 víctimas potenciales, y de acuerdo con datos de fiscalías locales y la Fiscalía General de la República (FGR) en el país hay abiertas mil 720 carpetas de investigación, pero dolorosamente en tres años, sólo se tienen 308 sentencias y únicamente 225 sentencias condenatorias.
Por lo tanto, es urgente detener el crecimiento del monstruo de la trata en Cuernavaca, en Morelos y en todo México.