Desgracias latentes por obra en Puente Apatlaco

La construcción de un supuesto muro de contención apenas se concluyó hace tres meses, aproximadamente, por la empresa francesa Freyssinet, explica Marco Antonio Domínguez Natividad, presidente del Consejo de Participación Social, de la colonia Adolfo López Mateos, en Cuernavaca. La semana pasada, esa obra se vino abajo, casi encima de la cancha deportiva del lugar, tras la primera lluvia de la temporada.

En plática con El Regional, Marco Antonio explica que él personalmente comentó a los representantes de la empresa francesa, Freyssinet, a cargo de la construcción del Puente Apatlaco (que, sin ir aún a ningún lado, se erige arriba de la colonia, su cancha deportiva y el muro caído), que esa pared de supuesta seguridad se vendría abajo. Y sucedió.

El supuesto muro de contención que Freyssinet construyó para "proteger" a niños y jóvenes que usan el espacio deportivo fue levantado con la mera apilación de "durmientes" (los mismos que se colocan entre ambos sentidos en la autopista) cubiertos de tierra, situación que el representante vecinal denunció en su momento, sin que la compañía hiciera caso, según acusa. Pocas semanas después y la primera precipitación pluvial de la época le dieron la razón.

Pero ése es sólo uno de los detalles que ponen en riesgo latente a los vecinos de la Adolfo López Mateos (colonia que pese a pertenecer a la capital morelense, dada su lejanía tradicionalmente ha sido olvidada por los gobiernos cuernavaquenses durante décadas). Hay otros puntos de riesgo que son responsabilidad de la firma gala.

La misma cancha que estuvo a punto de quedar inservible por el derrumbe de la semana pasada corre grave riesgo, dice Marco Antonio Domínguez, no sólo por el muro de contención que nuevamente se está construyendo, sino desde abajo. Indebidamente, el espacio para la práctica de deporte fue construido encima de tubos de drenaje que, en época de lluvia, en esa zona (cercana a donde se dio el caso del socavón), conllevan en la temporada millones de litros de agua que pueden provocarle daño. Tampoco en este aspecto, ni la empresa ni las autoridades que la vigilan han dado respuesta.

Pero un riesgo mayor, asociado con el río que corre junto a la comunidad, es que se  decidió cambiar el curso de ese cuerpo de agua corriente, para colocar las columnas de la gigantesca obra. Ahora, el cauce quedó más cerca de las viviendas y ello significará una amenaza permanente durante la temporada de lluvias que ya comienza. Lo indebido de dicha acción ha sido denunciado innumerables veces, a Freyssinet y autoridades, las mismas ocasiones que se ha dado atención omisa.

La SCT, primera responsable

El líder de quienes habitan la López Mateos subraya que la principal responsable, incluso antes que la firma francesa, es la autoridad. Legalmente, la primera es la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, cuyos funcionarios, en el sexenio pasado, fueron quienes licitaron la obra desde 2012, abandonada en un primer momento, y encargada a Freyssinet en 2017, la cual asumió todas las obligaciones incluidas en el contrato respectivo. Entre ellas, hay que decir, varias relacionadas con obras en dicha colonia.

Junto con la SCT, las autoridades de Protección Civil del municipio y del estado tienen legalmente responsabilidad en torno a todo lo referente a dicho puente, en materia de prevención de riesgos. Por su parte, la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas, de la administración estatal, según nos confirmaron el año pasado fuentes de ahí, son corresponsables, pues fue el gobierno morelense el que encargó a la SCT la construcción del ya famoso puente "sin fin".

El pasado 7 de febrero, Domínguez Natividad envió un escrito al gobernador Cuauhtémoc Blanco, a fin de poner en su conocimiento el incumplimiento de compromisos asumidos en minutas de trabajo y acuerdos, a lo largo de estos años, y pedir su intervención para que se corrijan fallas y omisiones.

Destacan en el texto leído ya por el mandatario, obras inconclusas que deberían beneficiar a la colonia, la reparación de calles destruidas por la maquinaria de Freyssinet pero, especialmente, la atención a daños en el drenaje, ciento por ciento adjudicables a los trabajos de esa firma y que representan un grave riesgo de inundaciones en la actual temporada de precipitaciones.