Denuncia el obispo desatención histórica al crimen en zona Norte
Los tres niveles de gobierno la abandonaron en materia de seguridad, acusa el prelado
Aplaudió que se iniciaron operativos para la clausura de varios aserraderos clandestinos
Guadalupe Flores
La inseguridad y violencia en Huitzilac se dejó crecer, aseguró el obispo de la Diócesis de Cuernavaca, Ramón Castro Castro. En entrevista, sostuvo que las autoridades de seguridad de los tres niveles de gobierno abandonaron en materia de seguridad al municipio.
Incluso sostuve que por años la población de ese municipio ha vívido con miedo ante la actividad delicuencial que se ha disparado en la zona.
Aseguró que hasta los turistas se rehúsan a transitar po la carrerera y autopista México-Cuernavaca por miedo a ser víctima de un atraco.
Aunque algunos automovilistas que utilizan la vía carretera optaron por no circular por ella después de la 4 de la tarde.
El también secretario general del Episcopado Mexicano, aplaudió que el Gobierno federal y estatal inició operativos para clausura de aserraderos clandestinos.
Aunque afirmó que se requiere una mayor coordinación entre las autoridades de los tres niveles de gobierno para resolver la problemática de seguridad y de tala clandestina que vive Huitzilac.
"Que bueno que está sucediendo el tema porque parecía que no sucedía nada y eso sucede desde hace año, a mi predecesor le robaron su carro precisamente, le secuestraron a su chofer por un tiempo...entonces, pone en evidencia una situación que parecía que no sucedía nada y esto nos ayuda para que ojalá haya justicia", manifestó.
Respeto a las actividades eclesiásticas en el municipio, el jerarca católico dijo que no se interrumpirán por los operativos de seguridad para detener a los talamontes.
