Cayó detenido en el Edomex el súper policía, Cárdenas Palomino

Cayó detenido en el Edomex el súper policía, Cárdenas Palomino

La madrugada de ayer fue detenido por integrantes de la Secretaría de Marina  y de la Policía Federal Ministerial (PFM), Luis Cárdenas Palomino, exdirector de Seguridad Regional de la Policía Federal qué comando Genaro García Luna en el sexenio de Felipe Calderón, 

Poco después se informó que el jefe policiaco qué fue condecorado justamente durante la administración gubernamental federal del panista, había sido ya ingresado al penal del Altiplano, en Almoloya de Juárez, Estado de México.

Luis Cárdenas fue detenido a la 4:50 horas de ayer lunes, en el domicilio con el número 19 de Retorno de Rambouillet, colonia Paseo del Bosque, Naucalpan, Estado de México.

Cárdenas Palomino ingresó cerca del mediodía al penal del Altiplano, donde fue puesto a disposición del juez de la causa, quien en las próximas horas resolverá su situación jurídica.

El pasado 24 de septiembre de 2020 se dio a conocer que el juez Guillermo Francisco Urbina Tanus, titular del Juzgado Decimosegundo de Distrito de Procesos Penales Federales, libró una orden de aprehensión en contra de Cárdenas Palomino.

A quien fue considerado el brazo derecho de García Luna, detenido por vínculos con el narcotráfico actualmente en Estados Unidos, se le imputa el delito de tortura en agravio de Mario Vallarta Cisneros, hermano de Israel Vallarta, así como de Sergio Cortes Vallarta y Eduardo Estrada Granados, presuntos integrantes de la banda de Los Zodiacos, quienes fueron detenidos el 27 de abril del 2012, en el caso donde estuvo vinculado la francesa Florence Cassez.

El juez Urbina Tanus consideró que existen las pruebas suficientes para acreditar que Cárdenas Palomino, en su calidad de superior jerárquico, autorizó para que a los imputados se les infligieran golpes con manos y armas,  además de que se les cubriera la cabeza con bolsas de plástico y en algunos casos se les dieran toques eléctricos con el fin de obligarlos a firmar confesiones en las que “aceptaban” ser integrantes de una banda de secuestradores.