Adolescentes y confinamiento
En opinión de Juan Salgado Brito
Durante la pandemia por covid 19 mucho se ha hablado de medidas preventivas y protocolos para evitar contagios, del confinamiento o la cuarentena, escuela a distancia, clases en línea, home office; sobre los esfuerzos, que han hecho la mayoría de las personas, maestros y alumnos para prepararse y enfrentar los retos y deberes de su trabajo o sus estudios, pero en sí que se ha dicho de los adolescentes?, de ese universo que ya no son niños y aún no son adultos. No por ser adolescente y haber nacido ya con la tecnología avanzada, significa que todo lo cibernético es fácil para ellos; muchos adultos pensaran que sí, la realidad es que no todos los adolescentes tienen las habilidades y destrezas para manejar las tecnologías y no por estar en confinamiento significa que todas las horas estén pegados a la computadora; si bien los maestros y mucha gente han tenido que hacer un gran esfuerzo para adaptarse al mundo virtual, lo mismo ha sucedido con los adolescentes que han tenido que redoblar esfuerzos para tomar sus clases en línea y continuar con la escuela a distancia de manera digital.
Más allá de las condiciones, deberes y rutinas que les han sido impuestas a las y los adolescentes su situación emocional y psicológica de salud mental y estados de ánimo deben ser motivo de atención y preocupación de sus padres desde luego, pero también de las autoridades y de la sociedad en su conjunto. De hecho es común escuchar que en los jóvenes y adolescentes han aumentado los dolores de cabeza, migraña, insomnio, depresión, estrés y otros malestares; todo esto no solamente por estar mucho tiempo en la computadora sino por el aislamiento, limitación de su libertad y de su autonomía, así como la imposibilidad de convivir con sus pares, sus amigo y compañeros, viviendo solamente rutinas impuestas y ante la autoridad de sus padres que por naturaleza la mayoría de los adolescentes rechazan.
Para la psicóloga, especialista en adolescentes, Carolina Sances Silva, el confinamiento para los adolescentes, implica encierro, amenaza a la salud y a la vida de personas queridas, alejarse de amigos, de cosas que disfrutan: implica un cambio importante en sus rutinas que les resulta exigente en lo emocional y psicológico.
Frente a este escenario que viven los adolescentes en esta crítica etapa de confinamiento por la pandemia y porque aún no están vacunados, con la posibilidad de próximamente regresar a clases, es importante no descuidarlos, que todos estemos pendientes de ellos y observemos con atención sus comportamientos, respetando su privacidad, sus sentimientos y apoyarles en lo más posible.