VIVENCIAS CIUDADANAS

Sin duda alguna, es interesante ver que ahora ya todos los dirigentes hablan de coalición, pero lo difícil de la selección de quien será el candidato de la alianza opositora está en que necesita ser un miembro de la sociedad civil, sin una participación directa con alguno de los partidos políticos, y que tenga experiencia política y sea conciliador porque llevar a cabo un gobierno de coalición no es sencillo; y el querer imponer a alguien que ya está identificado con alguno de los partidos no será fácil, y el ser candidato y mucho menos el ganador es difícil porque, para ganar, la coalición necesitará de al menos más de la mitad de las candidaturas  ciudadanas, y si el candidato no va acompañado de los perfiles correctos la tendrá casi imposible.

Si bien es cierto que el pleito en Morena es fuerte, y que la selección de uno de ellos o ellas va a separar a mucha gente, también es cierto que la ventaja en puntos que llevan hasta ahora no se puede llamar un triunfo irreversible; claro que se le puede ganar con un buen candidato arropado por un buen número de candidatos ciudadanos; y, para ganar, la coalición necesita conocer que no sean los mismos que han pasado de partido político a partido político y que tengan buena fama pública, que los que ya han estado en posiciones políticas está difícil que las tengan de nuevo.

Acordémonos de la historia y tomémosla en cuenta, quien no lo hace está decidido a perder. La historia de las elecciones en Morelos nos da muchos ejemplos de que las grandes diferencias en los puntos pueden rebasarse; sólo hay que recordar el pasado para podernos dar cuenta de lo que puede venir en el futuro. Chéquenlo los que ya se sienten dentro, se pueden quedar afuera.

Por lo pronto, y en vista de lo que sucede a nivel nacional después de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación le dio para atrás al plan B en su primera parte con nueve votos, podemos darnos cuenta de que la oposición está realmente en busca de quien la represente; y las “corcholatas” son muy fáciles de checar. Vemos a. una gobernadora de la Ciudad de México que está totalmente en campaña y a un Secretario de Relaciones Exteriores que pide piso parejo y quiere que quienes compitan renuncien a su cargos antes de iniciar las precampañas que, según dice el ejecutivo, serán resueltas por la encuesta, aunque todos pensamos que el dedo presidencial será la verdadera encuesta.

Aquí en Morelos, todos se pelean, hay quienes se ven ya casi con la candidatura, y las fichas del gobernador son Víctor Mercado y Cecilia Rodríguez, perfiles muy distintos pero con posibilidades ambos; por fuera, Margarita González Saravia, que tiene desde la Lotería Nacional una ventana importante y ha realizado ya varias vueltas por todo el estado; los alcaldes: Juan Ángel Flores que es considerado el mejor alcalde y Rafa Reyes, quien acaba de confirmar que no se baja de la contienda a la gubernatura, así como el hombre de experiencia, Juan salgado Brito; y Rabín Salazar, que se encuentra a diario recorriendo el estado, igual que Lucía Meza, que es senadora, pero al parecer no las tiene todas con ella. Todos ellos van por Morena, por otro lado se perfila aunque diga que no el Alcalde de Cuernavaca, José Luis Urióstegui, y hay quienes aseguran que la coalición llamará a un ciudadano; pero también es fácil darnos cuenta de que Ricardo Dorantes ya está en plena campaña, como el senador  Ángel  García, que aun después del accidente no quita el dedo del renglón y quiere ser el candidato de la alianza. En serio, si la coalición no proyecta un ciudadano sin partido y rodeado de líderes ciudadanos, no tiene posibilidades. Si no, al tiempo. ¿No cree usted?