Se normalizan labores en juzgados de Atlacholoaya
Tras el motín suscitado ayer en el Cereso Morelos
Francisco Zapata Cuevas 
Tras el motín suscitado ayer en el Centro de Reinserción Social (Cereso) Atlacholoaya, en Xochitepec, que provocó la evacuación del Juzgado Penal Oral Tradicional, del Poder Judicial, ayer las actividades del recinto se normalizaron.
Las actividades se realizaron con normalidad en el recinto adjunto al perímetro del Cereso de Atlacholoaya, después de la tensión que se vivió el pasado jueves por un nuevo amotinamiento por parte de los reos.
Cabe señalar que a raíz de un motín dentro del Centro de Reinserción Social (Cereso) Atlacholoaya, ubicado en Xochitepec, el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) ayer desalojó de emergencia a personal del juzgado penal tradicional penal ubicado en el perímetro del penal, ello ante la posibilidad de una contingencia mayor.
Aun cuando no lo informó de manera oficial el Poder Judicial, mediante algún desplegado a los medios de comunicación, sí se dio a conocer el suceso por parte del personal y debido a que se observaba su avance sobre la avenida que conecta con Ciudad Judicial.
El éxodo del personal administrativo y funcionarios comenzó minutos despees de las 10 de la mañana, cuando fue más vidente que existía “la ingobernabilidad” dentro del penal, por lo cual, de manera extra oficial, se sabe que la titular del Poder Judicial, María Del Carmen Verónica Cuevas López, giró órdenes para salvaguardar la integridad de los trabajadores.
A finales de Octubre la magistrada presidente también ordenó la evacuación de los centros de impartición de justicia, ello mediante un desplegado a los medios de comunicación, en donde informó que por los hechos suscitados dentro del penal, existía la posibilidad de que la integridad de los trabajadores del instituto impartidor de justicia corriera peligro.
El pasado 7 de noviembre ante los rumores de un posible amotinamiento y la retención de un custodio por parte de los reos del Cereso de Atlacholoaya, mantuvieron labores normalmente, este suceso no tuvo mayor repercusión en las labores de los juzgados, tanto así que incluso se llegó a afirmar que se desconocía cuál era la situación dentro del penal, por lo que las labores de impartición de justicia continuaron sin mayor inconveniente.
