Oxidación Municipal

En opinión de Mirna Zavala

Oxidación Municipal

La oxidación es un fenómeno químico debido a la producción de oxígeno. El termino, sin embargo, también se emplea para hacer notar el deterioro en el funcionamiento, por ejemplo, del cuerpo. Es común decir a alguien que esta oxidado. De igual manera, en cuestiones de salud se promueve ampliamente el consumo de sustancias antioxidantes para retardar precisamente el deterioro de las células. Infinidad de productos son adicionados con antioxidantes para una mayor duración.

 

Valga el uso del término para señalar que precisamente algo pasa con los municipios del estado que han venido sufriendo deterioro en su funcionamiento. Sufren de oxidación y requieren de acciones antioxidantes para evitar la disfuncionalidad de que son objeto en los últimos años.

 

Precisamente en las anteriores participaciones aquí publicadas he querido hacer notar algunos aspectos que reflejan con nitidez dicha oxidación. Y es que desde hace tres décadas el municipio viene transformándose desde un modelo centralizado por el poder ejecutivo a una auténtica autonomía influida por el cambio de partidos en el poder luego de los diversos procesos electorales realizados y la consecuente pluralidad de visiones y enfoques desde las que se observa.

 

Esta autonomía se refleja, por ejemplo, en el aumento de estructuras administrativas, políticas públicas diferenciadas territorialmente, libre ejercicio de los recursos públicos, disputa permanente por la asignación de mayores recursos, gestiones incluso internacionales para obtener ciertas ventajas de relaciones convenidas.

 

Circunstancia que también se refleja en el distanciamiento regional haciéndose muy complicado la generación de políticas públicas intermunicipales. Existe en la norma la creación de zonas conurbadas o metropolitanas que a la fecha muy escasamente los municipios que las integran, dialogan sobre problemas comunes que deberían resolverse de manera conjunta.

 

Lo que hace más complicada la gestión pública. El hecho de que municipios de diferentes partidos integren tales zonas genera celos, protagonismos o discordias por liderazgos, por citar algunas causas, para mejorar la calidad de vida de las familias.

 

Los contextos en que hoy se mueven los municipios ya no son los mismos que hace tres décadas y, sin embargo, parece que siguen ahí, impidiendo las posibilidades de desarrollo integral municipal.

 

Por otro lado, el aumento significativo de demandas sociales para reducir las necesidades de la población pone en jaque a las administraciones cuyos recursos son en gran medida insuficientes para cubrirlas.

 

Existen muchos más factores que van dificultando la buena marcha de las municipalidades. De ahí que sea una de las prioridades de la agenda de la representación popular que ostentó y a la que convocó a mis compañeros diputadas y diputados tomar en consideración para reflexionar con seriedad y elevado espíritu de servicio acerca de nuestra contribución hacia el futuro de los ayuntamientos y por consecuencia de las familias morelenses. En breve presentaré propuesta para una exhaustiva reflexión con la participación de diversos sectores de la sociedad, instituciones, académicos y expertos que nos permita alcanzar una nueva visión hacia el 2030, como parte de la agenda de desarrollo sostenible. Estoy segura que los retos del futuro exigen nuevas actitudes en lo que está legislatura podría ser pionera. Al tiempo. Que pasen buena semana.