Escala de Grises - La realidad que nos atraviesa

En opinión de Arendy Ávalos

Escala de Grises - La realidad que nos atraviesa

Debanhi Escobar Bazaldúa fue reportada como desaparecida el 9 de abril de 2022 en Nuevo León. La ficha de búsqueda e información sobre la joven de 18 años se viralizó en cuestión de horas. Gracias a la difusión del caso, autoridades como Samuel García, gobernador de la entidad, y la Fiscalía General de Justicia del estado se sumaron a los esfuerzos para localizarla.

 

Con jornadas de búsqueda organizadas por familiares, amistades y hasta otros estados de la República (Coahuila, Durango y Tamaulipas), los cuerpos de seguridad se movilizaron para reunir todas las pistas que pudieran revelar el paradero de Debanhi. El cuerpo de la joven fue localizado el 21 de abril de 2022, en la cisterna del hotel Nueva Casilla, en el municipio de Escobedo.

 

Las primeras versiones sobre lo ocurrido no tardaron en circular y se consideró un fuerte golpe en la cabeza como causa de muerte; resultado con el que la familia Escobar Bazaldúa no estuvo de acuerdo. Con el objetivo de encontrar la verdad, Mario Escobar, padre de Debanhi, solicitó un segundo informe forense.

 

Según la información oficial, obtenida después de varios análisis, Debanhi Escobar Bazaldúa murió por asfixia causada por sofocación y no por sumersión en el agua, lo que también confirma las irregularidades existentes en el caso. Desde ser localizada en una zona previamente inspeccionada hasta los diferentes criterios forenses, las fallas en el sistema de justicia en Nuevo León y en el país entero resultan evidentes.

 

Nueve meses después

 

Para agosto de 2022, a petición de la familia Escobar Bazaldúa, la Fiscalía General de la República abrió una carpeta de investigación por el feminicidio de Debanhi, hecho que se concretó el primer día de octubre del año anterior. Desde entonces, el proceso para garantizar justicia no ha terminado.

 

Nueve meses después de que se reportara su desaparición, dos empleadas del lugar fueron vinculadas a proceso. Ana Luisa “N” y Elida Yurith “N” fueron acusadas de presunto encubrimiento y falsedad de declaraciones. La gerente y la asistente del hotel, respectivamente, fueron imputadas por falsedad de declaraciones y encubrimiento en la investigación del suceso.

 

De acuerdo con el juez de control, a pesar de que podrán enfrentar su proceso en libertad, deberán presentarse a firmar una vez al mes y no podrán salir de Nuevo León hasta que se resuelva su situación legal. Las autoridades correspondientes han estipulado un periodo de tres meses para el cierre de la investigación complementaria.

 

Por su parte, Dolores Bazaldúa y Mario Escobar, progenitores de Debanhi, han seguido de cerca cada uno de los avances (y retrocesos) en el caso de su hija. Según la información publicada por El País, ambos tienen la esperanza de que las autoridades cumplan con su trabajo y el caso se resuelva.

¿Qué sigue?

 

Antes de que termine el primer mes del 2023, la familia Escobar Bazaldúa acudirá a la Ciudad de México con el objetivo de seguir los avances del Ministerio Público y, por supuesto, presionar a las autoridades involucradas para garantizar que el feminicidio de Debanhi no quede impune. Tal como han hecho desde el 9 de abril de 2022.

 

A pesar de la poca esperanza que representa la vinculación a proceso de las empleadas del hotel, el caso de Debanhi pasará a la historia como una evidencia más de la negligencia e incompetencia por parte del Estado para brindar seguridad a las mujeres, localizar a las víctimas de desaparición forzada, prevenir feminicidios y garantizar justicia en cada delito.

 

En lo particular, la prioridad es continuar con las investigaciones pertinentes y ubicar a las personas responsables del feminicidio de Debanhi para procesarlas de la manera correspondiente. Sin corrupción de por medio, sin acuerdos por debajo de la mesa. Es imperativo agilizar las operaciones para evitar la fuga y poder resolver el caso.

 

En lo que respecta al panorama completo, las prioridades parecen imposibles de resolver, especialmente en un Estado sin recursos y sin voluntad. La inacción ante la violencia de género y los 10 feminicidios que ocurren todos los días en México, es complicidad por parte de las instituciones y el gobierno. La ausencia de protocolos eficientes para localizar a las más de 100 mil personas desaparecidas en el país, es responsabilidad de las autoridades. Y la lista podría seguir.

 

Lo urgente es aceptar cada uno de los problemas estructurales que han permitido que la realidad sea esta, cuando se trata de exigir justicia. A partir de eso, es imperativo crear estrategias de prevención y protocolos de atención que estén respaldados por más que meras iniciativas sin fondo.

 

Nota de la autora: Esta es la séptima Escala de Grises dedicada al caso de Debanhi Escobar y sigo firme en lo que escribí hace casi seis meses: en caso de ser necesario, no será la última.

 

Feliz aniversario

 

Estos primeros días del 2023, Escala de Grises cumple cuatro años y, para no perder la costumbre, me gustaría extender un profundo agradecimiento para usted que me lee cada semana. Gracias infinitas por acompañarme en este camino que ha estado lleno de aprendizajes y satisfacciones.

 

Gracias por compartir conmigo unos minutos y por permitirme compartir con usted una parte de mi mente y los sentimientos que me encuentro cuando le abro los ojos a la realidad que nos atraviesa.

 

Me siento privilegiada y profundamente conmovida por poder seguir aquí, como si no hubiera pasado el tiempo o la vida. Igual que el primer día, es un completo honor para mí compartir páginas con personas a las que admiro tanto. ¡Gracias por darme papel y tinta a manos llenas!

¿Celebramos?

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