El campo, amenazado por el enemigo invisible

A consecuencia de la propagación del covid; campesinos no están preparados para enfrentar la emergencia

El campo, amenazado por el enemigo invisible
A consecuencia de la propagación del covid-19, que ha traído cerca de 150 decesos, los campesinos no están preparados para enfrentar la emergencia.

A consecuencia de la propagación del covid-19, que ha traído cerca de 150 decesos, los campesinos no están preparados para enfrentar la emergencia.

Así lo ponderó un campesino (cuyo testimonio fue citado por María Alejandra Elizabeth Olvera, perteneciente a los Estudios sobre el Patrimonio Biocultural de Morelos). Éste, desde su perspectiva, adujo que “… es un mal tiempo, porque en temporal, en tiempo de lluvias, pues ya nosotros tenemos lo que es del campo, variedades de hierbas, hongos y a lo mejor hasta raíces, pero ya es otro panorama. Ahorita no está lloviendo y no estamos preparados para la pandemia. No estamos preparados con pequeños viveros, invernaderos y empezar a producir nuestra propia canasta básica”.

Además, Olvera ponderó que la “modernización del campo” ha desplazado a los huertos familiares de las comunidades rurales del estado; los productos industriales los han suplantado; empero, ante el confinamiento del covid-19, éstos pueden generar alimentos.

Añadió que, ante los tiempos actuales, en que la pandemia se sigue propagando, esta tradición “milenaria” podría representar una “revaloración (…), pues inclusive en las ciudades, ante la escasez de alimentos, mucha gente se está planteando la posibilidad de comenzar a sembrar por lo menos una parte de lo que consume. En el campo, en donde en este momento aún no se percibe la catástrofe que podría llegar a ocasionar el covid-19, ya comienzan a plantearse también este nuevo reto”.

En un artículo publicado en la revista virtual “El tlacuache”, aquélla citó el testimonio del campesino: “Tenemos la mejor tierra para abastecernos de chiles, tomates, jitomates, lechuga, rábanos, pero esto del coronavirus pues sale así como relámpago y a todos nos deja sin siquiera tener idea de lo que pudiera venir a afectar. Si a nosotros nos hubieran dicho hace una año “espérense, porque viene una pandemia fuerte” pues entonces hubiera pensado “tengo que tener a las gallinas para que nos den huevos”, “tengo que tener un vivero, un invernadero para sembrar mis chiles, tomates, jitomates, lechugas y todo lo que hay del campo lo tengo en el traspatio”, pero esto nos agarró así de sorpresa y con esto del tiempo de estiaje, pues ahorita no se producen las hierbas. Estoy segura que a partir de esta emergencia mundial que se presenta ya como catástrofe por el número de muertes y por las consecuencias económicas que comienzan a presentarse, en el campo se volverá a antiguas estrategias productivas…”.