Vecinos buscan organizarse para reactivar rondines de seguridad
Cuautla, Mor.- Vecinos de diferentes colonias de Cuautla, están organizándose para buscar reactivar las rondas nocturnas de vigilancia para tratar de reducir los altos índices de delincuencia que se registran en el municipio. Destacaron que los asesinatos de las 2 mujeres en la colonia Pablo Torres Burgos, encendieron los “focos rojos” en todas las comunidades, debido a que la policía de Mando Coordinado “simplemente no sirve”.
Mario Delgado Ortiz de la colonia Hermenegildo Galeana, sostuvo que los vecinos han buscado organizarse con el fin de que se pueda prevenir diferentes delitos que han puesto en jaque a la población. “La verdad no solo son los crímenes sino también los robos a casa-habitación, los asaltos a transeúntes y hasta a los camiones repartidores de diferentes productos de consumo, o del gas; todos somos víctimas sin que haya un alto a estos desmanes”, resaltó.
Detalló que antes de alguna forma los rondines servían, porque salían con machete en mano varios vecinos organizados y cubrían varias manzanas, siempre vigilando que todo estuviera bien, que no había necesidad de algún auxilio. “Acá en las colonias nos conocemos, aunque sea de vista, y eso es lo importante, porque si detectamos algo sospechoso o nosotros lo vemos a se llama a la policía, esperando, eso sí, que lleguen a cumplir con los auxilios”, precisó.
El ayudante de la colonia Pablo Torres Burgos, lugar en donde sucedió el crimen de las 2 mujeres, una de 40 años de edad y las otra de escasos 14, Abraham Manuel Rivera Román dio a conocer que vecinos de esa comunidad se le han acercado para que se formen los rondines. Expresó que aunque hay temor, es más grande el miedo de que algún familiar salga afectado por la falta de vigilancia, “la verdad es que es mucha responsabilidad y lo estamos analizando”.
Manifestó que no es fácil conformar los rondines, aunque ya hay gente que se quiere apuntar, que está cansada de los delitos que se cometen sin que haya resultados; “son muchos los casos que se registran y no hay forma de pararlos”. Observó que de ahí a que los vecinos insistan en que se conformen las rondas nocturnas, al final, “acá nos conocemos, sabemos quiénes son bebedores consuetudinarios y hasta los que son drogadictos”, puntualizó.
En otras comunidades, también los vecinos ya están alzando la mano para organizarse, para volver a los rondines, para comprar silbatos de identificación en caso de un auxilio. “Es volver a aquellos tiempos en que había hasta veladores que en cada esquina silbaban para hacer saber que por ahí andaban, y cuando había un auxilio volvían a silbar de manera especial para que se les auxiliara, era una forma segura de atacar a la delincuencia”, relataron.