Agridulce

En opinión de César Daniel Nájera Collado

Agridulce

No fue un error, o mera coincidencia, que una imagen de López Obrador acaparase muchas de las portadas en los diarios. Su partido se jugaba la mayoría absoluta, y con esto, también se ponía en riesgo el poder casi totalitario que poseía el mandatario a través de sus diputados. Al final del día, los reportes preliminares del INE constataron que Morena había perdido tal mayoría. Podría parecer una victoria para la oposición; a pesar de que el partido del presidente haya ganado las elecciones de la Cámara, perdería alrededor del 20% de sus legisladores. Así, no alcanzaría las dos terceras partes del organismo, requeridas para una mayoría cualificada, que a su vez es necesaria para impulsar reformas que busquen cambios constitucionales. De esta forma, la coalición de AMLO se vería obligada a negociar con el bloque opositor, minoría que cuenta con suficientes curules para evitar que se aprueben reformas importantes sin diálogo. Sin embargo, este solo es un paso en pos del equilibrio. Es necesario recordar la existencia de todos los partidos satélite, carroñeros que inclinan sus asientos a conveniencia del poder. Partidos como el Verde, que son capaces de llegar a cualquier instancia, como pagar a varios “influencers” en plena veda electoral para promocionar su partido. Y también debemos evitar ser como estos últimos, que juegan con las elecciones como si se tratase de un asunto menor. No debe existir precio alguno sobre la libertad del país. Hemos dado un paso lejos del totalitarismo, sí, pero aún es pequeño, y tenemos que ser conscientes que faltan muchos más, los cuales hay que tomar en todas las elecciones venideras.