Piden se investigue a policías; alteraron la escena donde masacraron a familia
Increíble, pero la familia asesinada en su casa por policías estaban acusados de graves delitos en contra de quienes los acribillaron a sangre fría mientras dormían dentro de su domicilio en la colonia La Nopalera a manos de sujetos sin uniforme, pero adscritos a la Policía “Encubierta” de Alberto Capella, pero ya se les perdonó y ahora piden castigo solo contra los que acomodaron los cadáveres en forma macabra para sacar la foto y difundirla en los medios informativos, dentro de un cuarto de baño.
Este anuncio dio una luz de esperanza para que esta condenable masacre, la más cruel en la historia de Morelos, en la que murieron 4 jovencitas, un niño y una bebé de meses de nacida, ocurrida en la colonia La Nopalera, municipio de Temixco el 30 de noviembre del 2017, cuando gobernaba Graco Ramírez.
Por lo pronto, ya se instruyó a la Fiscalía General de Justicia, investigue a los responsables de alterar la escena del crimen, esto por instrucción de un Tribunal de Alzada del Poder Judicial.
Lo anterior se desprende a que las víctimas de la masacre, afrontaban en muerte, un proceso penal por el delito de homicidio en grado de tentativa, delincuencia organizada, portación y disparo de armas de uso exclusivo para las fuerzas armadas más lo que les resulte, cometido en agravio de los policías que los mataron.
De este modo, desde el panteón, los fallecidos tendrían que ser juzgados, ya que la CES de Alberto Capella y la Fiscalía así lo exigieron y ésta siguió su curso, por lo que durante la audiencia de una ejecutoria de amparo en revisión, la Primera Sala del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) determinó otorgar el auto de no vinculación a proceso penal en contra de los fallecidos, quienes en su momento la Comisión Estatal de Seguridad y la Fiscalía General les imputaba el delito de homicidio calificado en grado de tentativa.
Al no poder proceder en contra de los difuntos masacrados durante la madrugada al interior de su domicilio a manos de un grupo de civiles, integrados a la policía encubierta o “de inteligencia”, los integrantes de la primera sala, quienes la conforma, Luis Jorge Gamboa Olea, Andrés Hipólito Prieto y Nadia Luz María Lara Chávez, ordenaron a la Fiscalía General, indague a los primeros respondientes que participaron en la alteración de la escena del crimen, abra una nueva investigación, pero nunca se pide castigo para los asesinos.