Del alacrán, obtienen cura para matar la tuberculosis
Científicos en Cuernavaca, Morelos y California, EUU También funciona para inhibir el crecimiento de células cancerígenas Tras los primeros experimentos exitosos, van por la patente
El trabajo multidisciplinario, establecido entre científicos del Instituto de Biotecnología de la UNAM en Cuernavaca, Morelos, y la Universidad de Stanford en California, Estados Unidos, derivó en el descubrimiento de un par de nuevos antibióticos efectivos para el control de infecciones, uno de los cuales mata la microbacteria que produce la tuberculosis. En las investigaciones, también participaron investigadores del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición.
La reveladora noticia la dieron a conocer la semana pasada las instituciones participantes. Tras experimentos clínicos exitosos, ya se solicitó la patente respectiva, se informó.
A decir de las fuentes (en español e inglés), los investigadores mexicanos descubrieron que el veneno del alacrán de Veracruz (con nombre científico de DiplocentrusMelici) contiene sustancias que se oxidan en cuanto se exponen al aire. Este hecho genera dos componentes: uno rojo, el cual ya fue comprobado que funciona como un buen antibiótico en contra del estafilococo Aureus, causa de una amplia gama de infecciones (tanto leves como peligrosas) y otro azul, que mata la microbacteria responsable de la aparición de la tuberculosis.
Esos dos colorantes o componentes, se explicó,son también efectivos en la inhibición del crecimiento de células cancerígenas como "Jurkat (leucemia de células T), TE 671 (células de rhabdomiosarcona) y SH-SYSY (neuroblastoma de médula ósea), pero no causan daño a células neoplásicas del tejido pulmonar (línea A549, células de adenocarcinoma de pulmón)".
Se agregó que los científicos del Instituto de Nutrición fueron los que pudieron demostrar que el componente azul es más efectivo que el rojo "y además disminuye la proliferación de cepas de droga, resistentes de la microbacteria que causa tuberculosis".
En torno a los experimentos realizados, se explicó que sobre el resultado obtenido que probó que el componente azul no afecta el tejido epitelial del pulmón, "se aplicó vía traqueal directamente en los pulmones de los ratones utilizados como modelo de tuberculosis. Debido a la posibilidad que los productos descubiertos y sintetizados son candidatos a ensayos clínicos con miras a la cura de tuberculosis, ya se solicitó el registro de una patente".
Estas investigaciones, fruto de la colaboración entre las tres instituciones referidas, se dirigirán ahora a trabajar con empresas farmacéuticas interesadas en conducir los experimentos clínicos en humanos.
Los científicos del Instituto de Biotecnología, en Cuernavaca, Morelos, laboraron bajo la liderazgo del doctor Lourival Domingos PossaniPostay; en tanto, en el Instituto Nacional de Nutrición, el responsable fue el Dr. Rogelio Hernández Pando, mientras que en California, las investigaciones se dieron gracias a la dirección del Profesor Richard Zare.