Acusan a administradores de Agua Hedionda de abuso y hostigamiento
Sindicalizados del balneario los señalan además por despidos injustificados y falta de pagos
Los trabajadores de este parque acuático solicitaron la intervención de las autoridades estatales
Trabajadores sindicalizados del balneario Agua Hedionda, en el municipio de Cuautla, acusan al administrador, Marcelino Espinoza Gómez, y a su hermana Rosa Elia, por abuso, despidos injustificados, hostigamiento laboral y falta de pagos, por lo cual solicitan la intervención de las autoridades estatales.
A través de una carta a los medios de comunicación y por medio de una entrevista, algunos de los trabajadores del balneario dieron a conocer la situación de la que son presa en su fuente laboral, asegurando que en todo momento “son tratados como delincuentes”.
Uno de los inconformes, que prefirió mantener el anonimato para no ser objeto de represalias, indicó que hasta el momento no se les han brindado los uniformes correspondientes, así como no se les ha hecho entrega de vales de despensa desde hace 6 meses, además, de que los pagos se los han retrasado en ocasiones “de manera intencional”.
Los denunciantes argumentan que de los 31 trabajadores de planta que originalmente hasta el momento 10 de ellos han sido despedidos sin fundamentos válidos, a los cuales tampoco se les liquidó conforme a la ley, por lo cual decidieron interponer una demanda laboral cada uno.
Aunado a ello, Marcelino y Rosa Elia, ordenan labores extras y horarios extenuantes a los trabajadores que aún permanecen, y constantemente “los invitan a renunciar si ya no están cómodos en el balneario”.
Los sindicalizados aseguran que Marcelino y su hermana son los responsables de que el balneario prácticamente se encuentre en quiebra, ocultando las cifras reales sobre los ingresos diarios que se obtienen de las entradas y ventas de diversos productos dentro del centro acuático.
Extraoficialmente se sabe que la problemática ha llegado al punto de que los propios trabajadores, en exigencia a las autoridades estatales para solicitar una mediación o la salida definitiva de Marcelino, podrían llegar a un paro de labores para este próximo viernes.
Cabe señalar que dicho balneario es un fideicomiso estatal que desde sus inicios ha sido criticado por ser la caja chica de “algunos pocos”, un capital político que se les brinda a individuos o familias leales a gobernantes.
Se presume que la diputada federal por el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Brenda Espinoza, influyó en el pasado para que su padre, Marcelino Espinoza, obtuviese el puesto como administrador/director general del balneario.
Desde la entrada de Marcelino los trabajadores se han quejado por imposiciones y despidos injustificados de algunos de ellos; junto con Rosa Elia, quien ocupa un puesto clave al llevar las finanzas del balneario, Marcelino ha sido señalado por no mantener transparencia en la administración, pues a decir de los empleados se desconocen “las cifras reales” del lugar.