Protestan transportistas de la Ruta Ocho por alta inseguridad
Un paro de labores realizaron este fin de semana transportistas de la Ruta 8 con derrotero de la colonia Iztaccíhuatl de Cuautla, en demanda de seguridad debido a que constantemente son asaltados los choferes y los pasajeros, al igual que roban las unidades. Los concesionarios del transporte están cansados de demandar que se les brinde seguridad, no solo a ellos sino a todos los vecinos de esa comunidad que se ubica al Oriente de la ciudad.
Dijeron que ya ni los mismos pasajeros que son despojados de su dinero y teléfonos celulares, se presentan a denunciar de los asaltos que han sufrido en las unidades del transporte, porque consideran que es una pérdida de tiempo, porque no se hace nada para brindar seguridad. Manifestaron que no importa si es en la primera unidad del día o, a media mañana, media tarde, “a la hora que sea, los asaltos sigue de manera impune”.
Relataron que según las autoridades policiacas y de seguridad, llevan operativos, retenes que instalan, y que solo sirven para extorsionar a los automovilistas, a los motociclistas y transportistas, o todo aquel que se deje. Preguntaron que para que sirven esos retenes si la realidad es que en las colonias la inseguridad esta patente y que los malhechores trabajan a cualquier hora porque saben que no van a ser detenidos.
Molestos observaron que se pide el auxilio y llegan después de más de media hora del llamado de auxilio “ya para qué, el delincuente se va muerto de la risa, porque hacen sus fechorías de manera impune, nadie los va a detener”. Sostuvieron que ya están cansados, que la misma ciudadanía se encuentra harta de la inseguridad que se vie, “después que no se diga que no se debe de tomar la justicia por propia mano, qué hacen para detener la ola de delincuencia, nada”.
Afirmaron que no se trata solo de la colonia Iztaccíhuatl, la inseguridad se ve en todos lados, y con declaraciones o mesas de “inseguridad” no se va a solucionar nada, se deben de hacer operativos, estar pendientes. Expresaron que la realidad es que los delincuentes ya están por encima de cualquier autoridad de seguridad, se burlan porque no les hacen nada, no los detienen, y siguen cometiendo sus fechorías de manera impune.