Analizan investigadores efectos de la contaminación por minería

Analizan investigadores efectos  de la contaminación por minería
Patricia Mussali Galante profesora investigadora integrante del Laboratorio de Investigaciones Ambientales del CEIB, explicó que la contaminación por la industria minera ha estado presente desde hace siglos en todo el mundo.

La Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), a través del Centro de Investigación en Biotecnología (CEIB), realiza investigaciones para conocer los efectos de la minería en la salud humana y el medio ambiente, en el estado de Morelos.

En entrevista de Radio UAEM el pasado 23 de marzo, Patricia Mussali Galante, profesora investigadora integrante del Laboratorio de Investigaciones Ambientales del CEIB, explicó que la contaminación por la industria minera ha estado presente desde hace siglos en todo el mundo.

México ocupa el primer lugar en extracción de plata y plomo, de esta actividad se desprende la contaminación tanto a la flora como a la fauna, así como los efectos negativos en la salud humana.

El grupo de investigadores estudia este fenómeno creado por la industria de la extracción de metales y por ello, las líneas de investigación de Patricia Mussali están relacionadas con la toxicología y ecotoxicología para detectar los efectos negativos sobre el ambiente y la salud, además de buscar soluciones científicas.

Mussali Galante, informó que se han hecho estudios desde hace 15 años en la población de Huautla, municipio de Tlaquiltenango, donde detectaron arsénico en el agua que consumen, “ahí inició la alarma para investigar los efectos biológicos, porque detectamos altos niveles en la sangre relacionados con el daño en el material genético”.

La investigadora dijo que se observó y concluyó que la población tenía el riesgo de padecer enfermedades como el cáncer por el consumo de agua con arsénico, “pero otros estudios en animales que viven en desechos mineros observamos mermadas las poblaciones, como el caso de los roedores”.

Agregó que el impacto de los jales mineros no solo es local, porque se dispersan hacia los cuerpos de agua, “lo que significa que la contaminación no está contenida y viaja, hemos realizado estudios y detectamos que en varios kilómetros después de donde se ubican los jales sigue habiendo presencia de metales en animales y plantas”.