Gente del agro prevé riesgo de pérdidas ante la falta de lluvias
Cuautla, Mor.- La escasez de lluvias que se ha registrado durante las últimas semanas puso en duda a los campesinos para sembrar sus tierras, debido a que temen que el temporal sea irregular y en lugar que puedan obtener buenas cosechas pierdan la inversión que van a realizar, detalló el presidente del comisariado ejidal de Cuautla, Félix Mauricio Rodríguez Pineda. Abundó que hasta hace unos 15 días las expectativas eran diferentes, hoy el temor cunde entre los campesinos porque no ven que hay un buen temporal de lluvias.
Además, debido a la falta de financiamientos, escasos apoyos para el cultivo y la carencia de precios de garantía, los campesinos de esta región de Morelos prevén un ciclo agrícola difícil, con una disminución de sus ingresos y con pérdidas económicas, lo que podría obligar a los ejidatarios a vender las tierras para la construcción de casas.
Dijo que con la desaparición de la Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero, las actividades agropecuarias siguen colapsando, y si le agregan que hay falta de lluvias para iniciar las siembras, el panorama es más negro de lo que parece. “De por sí la situación
del campo es complicada y cada vez es más apremiante en el tema de los recursos y los precios de venta, y ahora nos quitan nuestro único banco que nos daba financiamiento”, precisó.
El dirigente campesino destacó que el estado de Morelos todavía registra una buena producción de caña de azúcar que se convirtió en el cultivo tradicional, debido a que la planta es de mayor resistencia, hasta de falta de agua. No sucede lo mismo, añadió en la producción de granos como maíz y sorgo donde se sigue batallando con los precios de garantía, además de que no hay una certeza de que se va a lograr una buena producción por la falta de precipitación pluvial.
Manifestó que lo anterior, sumado al incremento en los precios de los fertilizantes, ha impedido que Morelos sea autosuficiente en la producción de granos, lo que ha sido un duro golpe a la economía de los campesinos. Aun así, seguirán sembrando hasta donde puedan, antes de vender sus tierras, aunque este fenómeno ya se está dando en algunos casos “quizá sea poco, pero ya inició y es un problema que va a crecer”.
Indicó que la situación es grave, porque el campesino hoy tiene que ver que hay que hacer una fuerte inversión “como muchos de nosotros que le apostamos al maíz”, ya que no hay nada seguro; “es la misma situación que viven los productores de sorgo”, por la falta de precios de garantía y ahora la escasez de lluvias.